La falta de la licencia de apertura definitiva del recinto también forma parte del debate. La oposición cuestiona que el pago se hiciera avalado por un informe externo en contra de los técnicos.
Francisco Reyes (Publicado en “La Verdad” 15.4.2014)
Si algo quedó claro en el Pleno extraordinario celebrado desde temprana hora de ayer por la Corporación Municipal salinera, es que los tres grupos de la oposición, PSOE, Aptce y LV, que fueron quienes solicitaron la celebración de la sesión fiscalizadora, estuvieron unidos y de acuerdo en defender que el Ayuntamiento pagó un sobrecoste por la construcción del Teatro Municipal de algo más de tres millones de euros. Un dinero que dijeron, de ningún modo estuvo justificado, ni en cantidades ni tampoco en hechos tangibles que demostrasen la inversión que el gobierno popular aprobó que se pagase a la empresa constructora, la mercantil Acciona.
Por el lado contrario, el gobierno municipal del PP también estuvo firme en su defensa, al frente de la cual estuvo el portavoz, Joaquín Albaladejo, quien demostró sobre todo que hubo una tardanza considerable en el pago de las certificaciones que elevaron el coste inicial del teatro, ya que la última aprobación, en reconocimiento extrajudicial de crédito, se realizó cinco años después de la inauguración del recinto artístico. El popular también se apoyó en una serie de expedientes que dijo «justifican y acreditan el pago», y que en algunos de los casos están documentados con casi 800 páginas, tal y como exhibió uno de ellos.
La fiscalización de estos asuntos relativos al Teatro Municipal inaugurado el 28 de junio del 2006 se repitió en parte con respecto a la que ya se efectuó en el año 2008. Así se recordó en la sesión y también lo hizo sin intervenir en la misma, el exconcejal de Izquierda Unida José Manuel Martínez Andréu, quien estuvo entre el poco público que acudió al Pleno. Lo más grave, dijo el exedil, es el pago de los más de tres millones de euros. Pero esta convocatoria plenaria estuvo dividida en ocho puntos que tenían como objetivo una profunda fiscalización de las labores administrativas del proceso de la creación del teatro, de los modificados, de la aprobación de las liquidaciones finales por la anterior Junta de Gobierno Local y hasta la licencia de apertura que sorprendentemente sigue sin tener el recinto a falta de ejecutar una serie de correcciones que incluso fueron exigidas en su día por la Conselleria de Gobernación.
El edil de Urbanismo, Francisco Moreno se defendió y dijo que prácticamente todas se han cumplido ya y que «no se puede comparar el teatro con el Madrid Arena, cuando los grupos de la oposición están acudiendo a actos en el Teatro y piden entradas para muchos eventos». La concejal que más veces intervino, fue la socialista Fanny Serrano, quien demostró conocerse el asunto al detalle y aludió en varias ocasiones a un informe externo del despacho ‘Ariño’, el mismo que informó en la concesión de la contrata de la limpieza, que avaló el pago de los modificados, mientras que dijo que no hubo informes en el mismo sentido de los técnicos municipales. También el portavoz de Aptce, Domingo Soler, acusó a los populares de «pagar más de 3 millones ocultos» y echó en cara al alcalde, Eduardo Dolón, que estuviera firmando documentos durante la sesión. Albaladejo redujo el Pleno fiscalizador a «un intento de buscar imputaciones en el alcalde y el equipo de gobierno». El resultado final fue la desestimación de los puntos.
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Filed under: Actualidad, Política |
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