Redacción y Fotos: Pedro M. Grimao y Alfonso Pascual
Como es habitual en la noche del quinto viernes de Cuaresma, la Cofradía del Cristo Crucificado, María Santísima del Silencio y Nuestro Padre Jesús de la Salud, celebra el Solemne Ejercicio del Vía Crucis, por ese motivo, ayer, viernes 15 de marzo, a las 21,30 h. en el Templo Arciprestal de la Inmaculada Concepción, se volvió a celebrar la Liturgia de la Palabra, que da paso a la Bajada y Besapié al Cristo Crucificado y que fue oficiado por el párroco Manuel Martínez Rocamora. Instantes antes de que comenzase a pasar el numeroso grupo de fieles ante la Santa Imagen, se procedió a la imposición de la Cruz a los nuevos miembros que fueron acercándose hasta el Altar Mayor para que Jorge Esteve, presidente de la Junta Mayor de Cofradías junto con el párroco de la Inmaculada, les fueran colocando las cruces que durante el transcurso de la Liturgia de la Palabra fueron bendecidas.
Terminado el Besapie, en el que participó la Coral Torrevejense “Francisco Vallejos” que dirige Aníbal Cano Pettersen, interpretando “Señor me cansa la vida” y “La Saeta” de Machado y Serrat, comenzó en el interior del Templo, el Vía Crucis, que discurrió por las calles Caballero de Rodas, Bazán, Santísima Trinidad, hasta la Plaza del Calvario donde les espera la Coral “Manuel Barberá” que dirige Sergey Larkin y que interpretó “La Pasión” y nuevamente se volvió a interpretar “La Saeta” de Machado y Serrat, continuando el Vía Crucis por las calles Torresal, Patricio Pérez, Caballero de Rodas hasta el Templo Arciprestal, donde, antes de acceder a su interior se rezó la 14ª y última estación. Finalizado el Vía Crucis, la Imagen del Cristo Crucificado fue colocada en su trono quedando así expuesto hasta la noche de Jueves Santo para la Procesión del Silencio.
Descubre más desde Objetivo Torrevieja
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
Filed under: Cultura |
Deja un comentario