Álbum, pinchando sobre la foto
En la tarde de ayer domingo tuvo lugar en la Parroquia del Cristo de la Expiración de la pedanía murciana de Santa Cruz, la bendición de la nueva imagen realizada por el escultor torrevejense, Víctor García Villalgordo. En ésta ocasión ha llevado a cabo la imagen de San Pío de Pieltrelcina, popularmente conocido como “el Padre Pío”, beatificado y canonizado por el Papa San Juan Pablo II en los años 1999 y 2002 respectivamente y que despierta una gran devoción sobre todo en Italia.La parroquia de Santa Cruz se llenó por completo de fieles que asistieron a una solemne misa en la que se efectuó la bendición a cargo del párroco, Marcelo José María Felguer Iglesias, gran devoto del Padre Pío, quien encargó a Víctor García la imagen para que se le pueda dar culto en la citada parroquia. El sacerdote compartió en su homilía varias de las experiencias personales que ha vivido en torno a la devoción a este fraile y sacerdote italiano perteneciente a la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos, relatando curaciones y conversiones que se achacan a su intercesión. Antes de la misa el párroco cedió la palabra al escultor Víctor García quien explicó algunas de las características de la imagen de vestir, realizada en madera de cedro, con una altura de 170 cms. La talla del Padre Pío es de un gran realismo y perfección y en el interior de su pecho ha sido colocada una reliquia con uno de los cabellos del beato, así como un pequeño trozo de uno de sus hábitos que han sido traídos expresamente desde Roma. El párroco en sus elogios señaló que “parece que nos está hablando”.
Al término de la ceremonia los varios centenares de personas que asistieron pasaron por delante de la imagen del Padre Pío para besarlo y tocarlo, así como también lo hicieron ante un relicario del fraile italiano que también estuvo expuesto en el altar mayor durante la misa. Igualmente se sucedieron las felicitaciones al escultor, Víctor García, por el gran trabajo realizado.
Padre Pío de Pietrelcina, nacido Francesco Forgione, O.F.M. Cap. (Pietrelcina, 25 de mayo de 1887 – San Giovanni Rotondo, 23 de septiembre de 1968) fue un fraile y sacerdote católico italiano de la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos, famoso por sus dones milagrosos y por los estigmas que presentaba en las manos, pies y costado.
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