Objetivo Torrevieja

La exposición invitaba a reflexionar sobre algo tan usual e imprescindible y, a la vez, tan complejo en nuestra vida diaria como es el habla
La Exposición de la Obra Social La Caixa “Érase una vez…¡el habla!”, que se ha mantenido abierta al público en una gran carpa instalada para la ocasión en el recinto portuario de Torrevieja, desde el 4 de julio hasta el pasado miércoles, 3 de septiembre, ha sido visitada por un total de 23.856 personas. El concejal de Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Torrevieja, Luis María Pizana, se ha mostrado muy satisfecho por la gran aceptación que ha tenido esta última exposición de la Obra Social “La Caixa”, la cual ha atraído a gran número de turistas y, especialmente, a familias. Pizana ha concretado que durante el mes de julio la exposición fue visitada por 13.165 personas, mientras que en agosto y los cuatro días de septiembre ha sido visitada por un total de 10.691 personas. El edil de Cultura y Turismo ha destacado la gran afluencia de público que tuvo la exposición en la semana del 14 al 20 de julio, que fue visitada por 3.478 personas, con una media diaria de 497 personas. Sin embargo, los días de mayor número de visitantes fueron el miércoles 16 de julio (991 personas), el domingo 6 de julio (964 personas) y el jueves 14 de agosto (679 personas). Asimismo, cabe destacar que un total de 1.489 personas recorrieron la exposición a través de las visitas guiadas que se llevaron a cabo de lunes a viernes, a las 19:00 horas, y sábados, domingos y festivos, a las 12:00 horas y a las 19:00 horas.
La exposición Érase una vez… ¡el habla! se ha centrado en el origen y evolución del lenguaje y que cuenta cuándo y cómo apareció la capacidad de hablar en nuestros antepasados, qué partes del cuerpo humano la hicieron posible, los aspectos esenciales que caracterizan el lenguaje humano y cómo ha evolucionado. Una exposición que invita a reflexionar sobre algo tan usual e imprescindible y, a la vez, tan complejo en nuestra vida diaria como es el habla. Los tres bloques en los que se ha dividido la muestra — La comunicación en los seres vivos; El habla: una ventaja de la evolución; Lenguaje, más que un código de signos — han permitido a los visitantes vivir la experiencia de una araña macho en el ritual del cortejo, inhalar aromas generados como medios de defensa o territorialización, simular la voz de un Neandertal o aplicar diferentes dispositivos de comunicación como los sms.

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