Cerca de un centenar de personas entre familiares y amigos piden que se abra una investigación para esclarecer las causas de la muerte de Bruno Manuel Miranda Gomes de 25 años y que falleció el pasado 19 de marzo en accidente de ciclomotor
En la tarde de ayer un centenar de personas se concentraron en la Avd. Rosa Mazón, justo en el lugar en el que hace dos semanas fallecía en accidente de ciclomotor el joven Bruno Manuel Miranda Gómes, joven de 25 años, vecino de Torrevieja y ex miembro de protección civil. El fin de esta convocatoria no era otro que pedir justicia y que se esclarezcan las causas de la muerte, que según familiares y amigos pueda haber algo más que un fatal accidente.
Según el atestado policial el joven fallecido conducía “supuestamente “el ciclomotor en el momento del accidente, datos que tanto para familiares, como para amigos de Bruno, carecen de fundamento porque según cuentan estos, el joven no tenia carnet de ciclomotor y jamás había conducido una moto, aparte de que no se adjuntan pruebas en el atestado cómo para pensar que este fuese el conductor y no la otra persona que circulaba en el ciclomotor y que sólo se basan en la palabra de los agentes.
En un primer momento se informó a la madre del joven que el ciclomotor había sido robado y carecía de seguro obligatorio, cosa que no se refleja en el atestado en ningún momento y que según algunas informaciones este ciclomotor pertenecía al otro ocupante del mismo, dicho ocupante en el momento del siniestro dio positivo en el control de alcoholemia al que fue sometido por los agentes de la policía local de Torrevieja, antes de ser trasladado al hospital por una ambulancia.
Al parecer y siempre según los familiares hay muchas lagunas en el atestado policial, horas que no cuadran, el hecho de no presentar como prueba las cámaras de vigilancia que hay cerca del lugar del accidente o las cámaras de seguridad de los negocios cercanos al lugar del trágico accidente, la tardanza por parte de las autoridades de informar a la familia en un momento tan difícil, incluso el hecho de que el otro ocupante del ciclomotor y testigo directo del suceso, se contradijo en sus declaraciones, sobre quién era el conductor en el momento del accidente, estos datos hacen que duden de lo escrito en el atestado que ha estado cerca de dos semanas bajo secreto de sumario.
Es por esto y por algunos datos más que tanto familiares como amigos exigen a las autoridades competentes que se abra una investigación con el fin de saber la verdad de lo que ocurrió la mañana del 19 de marzo y si se trata de un accidente cómo apuntan las autoridades o se trata de algo más.
Según los convocantes de la concentración están dispuestos a seguir con esta medida hasta que se consiga que se les escuche, tanto si tienen que manifestarse en los juzgados cómo si tienen que volver todos los días a hacerlo al lugar del accidente.
¡JUSTICIA PARA BRUNO!!
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