El Templo Arciprestal de la Inmaculada Concepción, fue ayer una verdadera fiesta, en la que cientos de familiares se dieron cita para asistir a cuatro bautizos que se celebraron tras la misa dominical de las doce de la mañana. El párroco José Antonino Gea , junto al seminarista, Fernando Galvañ, fueron los encargados de efectuar el rito del Bautismo, precedido por la bendición del agua y por las renuncias y la profesión de fe. La bendición del agua es “una oración solemne del celebrante, que, recordando la historia de la salvación e invocando a Dios, bendice el agua del Bautismo o recuerda su bendición”. Después junto con los padres y padrinos, se derrama el agua bendita sobre la cabeza del candidato, pronunciando la invocación de la Santísima Trinidad, es decir, del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. José Antonio Gea con el buen humor que pese a la importancia del Sacramento tiene, no dudó en nombrar candidatos a los coros de nuestra ciudad, a dos de los neo catecúmenos que lloraron a pulmón abierto en el momento de caerles el agua sobre sus cabezas.
Previamente y durante la Misa, realizó su primera comunión una niña, de la cual desconocemos el nombre, pero que “Objetivo Torrevieja” como es habitual publica las fotos de ambos sacramentos para que puedan ser vitos por los interesados.
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