Álbum, pinchando sobre la foto
La sala sinfónica del Auditorio de Torrevieja, llenó anoche su escenario con el humor, y el arte de María Peláe, que a lo largo de sus más de diez años de carrera, la ha convertido en una estrella de la canción española moderna. La de Málaga y su banda arrancaron con “Cómo me las maravillaría yo” un emotivo remix homenaje a la gran Lola Flores, que ha hecho que se la conozca como la Faraona del siglo XXI. Peláe cantó su oda en clave de humor al postureo en redes sociales, “Y quién no” Con un público entregado.
De vez en cuando María interactuaba con el público pidiéndoles que movieran los ojos que viera su alegría por estar allí aun que llevaran mascarilla. Se arrancó después con “En casa de herrero” haciendo un giro por sus raíces flamencas de a golpe de caja y “quejío”, con “Soy” o “Tablas”. Siguió la actuación con “Si se achucha”, y “Confesión”, el último lanzamiento de la andaluza.
Quiso María Peláe terminar con temas como el medley “Tumbao” -en honor de Celia Cruz- o con “La niña”, un tema que si no fuera por el covid, habría puesto la sala en pie bailando. Con Antonio Bravo en la batería y Daniel Alanís en las programaciones y un bajo ocasional, y la guitarra que la propia Peláe se endosó como un suplemento más, nos llenaron del optimismo necesario para afrontar el mundo.
En fin un espectáculo lleno de arte, que en nuestra ciudad, pese a la pandemia, aún podemos disfrutar y apoyar con todas nuestras fuerzas.
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