Alfonso Pascual Ruiz
En la noche de ayer, jueves 10 de marzo, al finalizar la Celebración de la Eucaristía de las siete y media de la tarde, tenía lugar una vez más la tradición de realizar la Bajada o Descendimiento de Cristo Crucificado desde su altar en la Parroquia de la Inmaculada, en los días previos al Vía Crucis, para ser expuesto en Solemne Besapie ante sus cofrades y devotos. Previamente y durante el acto litúrgico oficiado por el párroco, Manuel Martínez Rocamora, se realizó la bendición de las cruces impuestas a los nuevos cofrades, que llegaron a superar la treintena. El acto contó con la participación de la Coral Francisco Vallejos dirigida por Aníbal Cano, que interpretó, mientras los devotos se acercaban a besar los pies a Cristo, “Señor me cansa la vida” y “La Saeta”.
Una bajada de Cristo que dará paso al Vía Crucis al Calvario que tendrá lugar esta noche a la 21 h., y cuyas estaciones serán cantadas por tercer año consecutivo, por el Coro Maestro Ricardo Lafuente, según la composición del Vía Crucis del propio Ricardo, compuesta en 1982 como regalo a la JMC recién fundada. A la llegada a la plaza del Calvario, les esperará la Agrupación Coral Manuel Barberá.
La Cofradía también recuerda que el domingo 13, a las 12 del mediodía se celebrará la Eucaristía Anual, en el Templo de la Inmaculada.
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