En un solo día entregó una imagen de la Madre Esperanza en Santomera y un centurión sanedrita en Rafal
Álbum, pinchando sobre la foto
Álbum, pinchando sobre la foto
El torrevejense Víctor García, continúa llevando el nombre de Torrevieja, a través de su arte y en esta ocasión, en un solo día presentó dos obras, muy distintas en su concepción pero ambas, verdaderas obras de arte. Así por la mañana el Teatro del Siscar de Santomera acogió el acto de presentación y bendición de la Imagen realizada por nuestro escultor de la Beata Madre Esperanza de Jesús (1893 1983), que fue fundadora en 1930 de las esclavas del Amor Misericordioso, congregación religiosa dedicada sobre todo a la labor pastoral y docente. Esta obra de 145 de altura realizada en madera de tilo con policromía al óleo, constituye un verdadero retrato llevado a la escultura de esta beata. La imagen tendrá como destino el templo parroquial dedicado a la patrona Nuestra Señora de los Ángeles del Siscar, una pedanía del municipio de Santomera (Murcia), localidad natal de la madre esperanza de Jesús. Para su ejecución el escultor torrevejense, contó con el asesoramiento de dos monjas de la Orden que conocieron personalmente a la beata cuyo nombre era Josefa Alhama Valera. Al finalizar el acto la presentadora del evento invito al escultor a desarrollar el proceso de creación de la imagen al público asistente y tras la exposición del proceso el público asistente se puso en pie en un aplauso emocionado y alabaron la fidelidad de la imagen con la madre.
El centurión de Nuestro Padre Jesús, en Rafal
El mismo sábado 10 de febrero, a las 7 de la tarde en la iglesia de Nuestra Señora del Rosario de Rafal, la cofradía Nuestro Padre Jesús de la Salud presentaba la segunda imagen. Se trata de un soldado del Sanedrín para el misterio del Prendimiento de Rafal. El titular cristífero de dicha corporación de penitencia, fue realizado también por Víctor García Villalgordo. La talla es la segunda figura del ambicioso grupo escultórico que el pintor y escultor torrevejense se encuentra llevando a cabo para dicha cofradía. Equiparando el pecado por su frialdad, siguiendo la herencia del medievo a la hora de representar brutalmente a los verdugos de la pasión frente al adivino aplomo de un Cristo idealizado, este guardia judío ha sido concebido con gran expresividad en el momento que se dispone a tirar con dureza de la zona a la que ha sido amarrado Jesús, ordenando iniciar su trayectoria al palacio del Sumo Sacerdote. Al comenzar la ceremonia, el escultor y el presidente de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Salud, Francisco Javier González Perales, descubrieron la imagen ante un público que rompió en aplausos al ver la belleza de la misma. La última obra de Víctor se encuentra totalmente anatomizada con talla y policromía al óleo. Es de tamaño natural para vestir ya que tiene unos 180 cm de altura, careciendo de brazos articulados. Las siguientes figuras para el prendimiento de Rafal serán próximamente un sacerdote del Sanedrín y el apóstol San Pedro
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Filed under: Actualidad, Cultura |
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