Una grúa retiró ayer los palos que quedaban y que dejan el puerto sin su silueta más característica
Álbum, pinchando sobre la foto
Sin nota de prensa por medio, sin previo aviso, ayer el Pailebote Pascual Flores, perdía su característica y atractiva figura, que desde hace diez años aporta al puerto de Torrevieja, para quedarse en un simple barco “sin fuste ni buste”. Desde primeras horas de la mañana una grúa se encargó de desarbolar al barco, quitando los tres palos que seguían en pie. Y es que al parecer y según declaraciones del concejal de cultura, Domingo Pérez, los palos se retiran para evitar que debido a su podredumbre, un día de estos les caiga encima a los turistas que diariamente visitan los Museos flotantes. El velero que se terminó en 2009 y nunca ha navegado, a excepción de un pequeño viaje a un astillero andaluz, del que volvió para fondear de nuevo en el puerto, e ir muriendo poco a poco, hasta que si nadie lo remedia desaparezca. Dicen que lo van a reparar, pero como de promesas no vivimos, ni los hombres, ni los barcos y son tantas y tantas las que se promesas que se hacen, y más en tiempo electoral, sin llegar a cumplirse, estamos en nuestro derecho a ponernos en lo peor. Un pailebote que ha pasado por muchos proyectos, desde ser escuela de vela de la Comunidad, a organizarse viajes programados en él,… ni una cosa ni otra … “y lo que te rondaré morena”.
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