Objetivo Torrevieja

Álbum, pinchando sobre la foto

El Ayuntamiento de Torrevieja celebró en la tarde de ayer un pleno extraordinario de fiscalización sobre el cambio de usos del edificio construido por la Generalitat como nuevo Museo de la Semana Santa. El pleno se celebró a petición de los concejales del grupo municipal del Partido Popular, quienes se mostraron en contra de la resolución adoptada por la Generalitat a petición de la alcaldía para que de las cinco plantas del edificio ya terminado en la avenida de las Habaneras, dos estén destinadas a museo del patrimonio de la Semana Santa salinera y de los tres sótanos solo uno sea destinado a usos de las cofradías. El resto del edificio sería destinado a albergar otras dependencias municipales como el Museo del Mar y la Sal, así como otros servicios administrativos. Tanto el alcalde, José Manuel Dolón, como los cuatro partidos del gobierno municipal se mostraron a favor del cambio de usos y también se sumaron los concejales del grupo municipal de Sueña Torrevieja. En contra votaron los concejales de los grupos municipales del Partido Popular y Ciudadanos, pero ante la ausencia de la concejal del PP, Agustina Esteve, que se encuentra convaleciente de una operación quirúrgica, el alcalde utilizó su voto de calidad y rompió el empate a doce votos en favor de la opción que defendía.
Durante el primer tramo del pleno el alcalde detuvo su celebración en varios instantes por el ruido que se colaba en el salón como consecuencia de la concentración convocada a las puertas del Ayuntamiento por la Junta Mayor de Cofradías. José Manuel Dolón dio orden en varias ocasiones a la Policía Local para que se identificase a los concentrados en la calle que hacían ruido, así como a los que en el interior del salón de plenos se protestaban en voz alta.
Al término del pleno el alcalde y los concejales del gobierno municipal recibieron sonoros abucheos en el momento de abandonar el Ayuntamiento, mientras que los concejales del PP fueron aplaudidos.

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