La acusó “de haber cerrado chiringuitos y mandar familias al paro en plena temporada alta
La concejal de Actividades, Fanny Serrano, ha lanzado un mensaje a los establecimientos de la localidad recordándoles que “hay que cumplir la legalidad en materia de ruidos, de horario y de seguridad”. Las declaraciones las ha hecho en una rueda de prensa en la que ha anunciado que se va a continuar con las inspecciones, y en la que ha anunciado que de cara a la próxima semana está previsto que se produzca el cierre de varios establecimientos. Serrano ha dicho que “se ha acabado la tolerancia. Ha habido relajación en el cumplimiento de las normas y hay que cumplirlas a rajatabla”. La edil ha señalado que solo así será posible conciliar las actividades de los establecimientos con el descanso de los vecinos y los veraneantes que nos visitan. Sobre este particular también ha recordado que los chiringuitos de la playa solo pueden tener música ambiente, y nada más allá de lo que “todos entendemos” en este concepto.
Igualmente ha anunciado que va a emprender acciones legales contra el concejal de la oposición, Luis María Pizana, por las declaraciones que ha realizado en las que le acusa “de haber cerrado chiringuitos y mandar familias al paro en plena temporada alta” una “calumnia” de la que “tendrá que responder en los tribunales”.
Serrano ha asegurado que cuando aplica una orden de cierre es “porque cuenta con un informe jurídico en el que dice que la única resolución posible es el cierre y/o con uno técnico que se refiere a la peligrosidad para las personas. Aquí no se ha cerrado nada que no fuera absolutamente ilegal e ilegalizable o que no tuviera un grave problema de seguridad para las personas”
En este sentido ha afirmado que con esas declaraciones “se está mandando un mensaje a la sociedad de que la ilegalidad se permite en este municipio, cosa que no es verdad, o que la concejal no está realizando las actividades como corresponde”.
Además le ha parecido “curioso” que critiquen que se cierren establecimientos ilegales, algo que en su opinión “puede tener dos lecturas: Que la oposición está haciendo proselitismo de la ilegalidad, que me parece muy grave, y otra que están diciendo que realizo cierres no ajustados a la legalidad”.
En el último mes en el municipio se ha cerrado una chatarrería en la que se trabajaba con este tipo de material, así como con baterías y residuos peligrosos, que carecía de la licencia ambiental necesaria a para obtener la licencia de actividad. También se ha decretado el cierre de dos quioscos situados en un espacio de dominio público que no contaban con ningún tipo de autorización, otro quiosco que también carecía de autorización y un establecimiento, clausurado con carácter provisional, por no cumplir con los itinerarios de evacuación de las personas con discapacidad.
Serrano ha señalado que el índice de expedientes de cierre es “ínfimo” comparado con el número de solicitudes de apertura, y que aquellos en los que se decreta el cierre son por “ilegalidad manifiesta. Si no actuamos estaríamos cometiendo un delito, una prevaricación administrativa en modalidad de comisión por omisión”
Sobre este asunto no ha descartado revisar algunos expedientes, tramitados antes de que fuera nombrada responsable del área de actividades, en los que tenía que haber determinado el cierre “pero falta la firma del anterior concejal”
Serrano ha calculado que un diez por ciento de los locales no cumple la legalidad y ha cuestionado que el resto, que cumplen con todas las normas tengan que soportar esa “competencia desleal”
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