Los salineros se reponen magistralmente y superan 3-1 al Algorfa
Älbum, pinchando sobre la foto
El SC Torrevieja logró su primera victoria del año después de una primera parte en la que el Algorfa le maniató y se adelantó de pena máxima. Pero en la reanudación la verticalidad local y la fiebre por la victoria desarboló a los visitantes y Hucha honró su fama goleadora con un tanto antológico que describió una parábola incontestable por la escuadra desde área. Kevin anotó el 1-2 a pase de Álex con un gran control y posterior remate de puntera armado sin apenas espacio, y nuevamente Hucha remachó a la red una jugada colectiva, en la que participaron jugadores como Lukitas y Manu Amores y en la que sería injusto nombrar solo al goleador. Una remontada que parecía milagrosa y cuya grabación entera ya está disponible en el canal de youtube del SC Torrevieja CF, porque muchos aficionados la contarán a sus allegados y conocidos pero a veces es imprescindible ver para creer.
Era el estreno como entrenador de Jesús Santander tras la destitución de Carlos Pérez. En la primera mitad el Torrevieja intentó triangular y abrir mucho el campo, pero el Algorfa presionó en tres cuartos ocupando el campo de tal manera que el Torrevieja no podía superar la espesa zarza visitante. Quizá se echó en falta en los locales la participación de un “jugón” como Cristian para ayudar a desatascar el panorama. Hubo dos ocasiones del Algorfa y un posible penalty, hasta que en otra llegada el colegiado señaló pena máxima y el 0-1 hacía aflorar nervios en la parroquia local. Aún así, y contra un rival correoso, los salineros forzaron un par de ocasiones claras, pero hasta el descanso no cambiaron las cosas.
Con el Algorfa bajando el pistón físico y el Torrevieja decidido a ser rebelde contra su destino más reciente, las energías se multiplicaron en el bando local y con algunas variaciones tàcticas y una fe inquebrantable, el asedio fue incontenible para el Algorfa, que arañó algunos minutos al crono intentando salvar algún punto, pero no pudo contener la avalancha de amor propio salinera. La afición, necesitada de alegrías, festejó por todo lo alto un pequeño gran milagro que revela que el equipo estaba herido pero no muerto. La adrenalina y el júbilo se desataron por fin después de un duro final de 2021 y una cuesta de enero que había supuesto una tortura para el sistema nervioso del club, que tras la pequeña gran revolución lograda en este choque aplazado demuestra que aún está vivo y coleando.
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