Colorín colorado, mientras ha habido opciones se ha intentado
Álbum, pinchando sobre la foto
El SC Torrevieja no pudo sobreponerse a un partido muy solvente del Catral, equipo que con 13 puntos de ventaja sobre el Pinoso, segundo clasificado, se proclama virtualmente campeón de la categoría cuando restan 7 jornadas en disputa. Y aunque los salineros caen a la tercera posición, todavía tienen un partido menos disputado que el Pinoso, con lo cual aún dependen de sí mismos para amarrar el subcampeonato en su campaña de debut en la primera regional. Asimismo, este fin de semana se disputa el Pinoso-Torrevieja, lo cual trae a colación una de las realidades del fútbol, buena o mala según se mire: Cuando silba el colegiado, ganes o pierdas, ya tienes que estar preparando el partido siguiente, y más en este caso.
Volviendo al choque contra el Catral, era un partido marcado en rojo en el calendario meses atrás, pero los salineros llegaron un tanto mermados. Sin su goleador Hucha en el equipo titular y con Fredrik fuera de la convocatoria, entre otras adversidades, había que medirse a un rival muy trabajado y sin concesiones.
Pero los primeros veinte minutos fueron de dominio salinero, consiguiendo incluso un par de acercamientos de cierto peligro. A continuación el Catral, que por momentos había mostrado excesivo respeto, se estiró y respondió con otras dos llegadas que presagiaron lo que ocurrió al filo del descanso: el gol de Joselu tras un disparo en la frontal del área que desvió Manu Paredes. Si el gol fue psicológico, en la reanudación llegó otro mazazo para los locales,
cuando nuevamente Joselu, que cuajó un notable partido en la medular, situó el 0-2 prácticamente en la primera jugada de la reanudación. Moralmente el Torrevieja parecía desfondado, como si sus últimos tropiezos le hubieran restado la fe para intentar con convencimiento la hazaña de la remontada. La solidez del Catral aminoró las opciones torrevejenses hasta tal punto que daba la sensación de que ni jugando un par de prórrogas se hubiera recortado distancias para soñar lo imposible.
Lo cierto es que el Catral no dejó resquicios a la espalda de la defensa, mi permitió maniobrar en banda a los salineros. Asimismo, en la medular supieron los visitantes escalonarse para punzar a la contra y tejieron un rombo que ahogó paulatinamente las ilusiones locales. El 0-3 de Diego redondeó un resultado contundente que deja al SC Torrevieja en su segunda campaña lejos ya de soñar con el campeonato. Pese a todo, el equipo dirigido por Jesús Santander nunca dejó de vaciarse.
Muchos de sus futbolistas yacían en el verde tras el pitido final y sólo se levantaron para agradecer a la afición el apoyo disfrutado durante una campaña en la que se ha disfrutado y soñado mucho. Los seguidores que han conocido este año el proyecto y se han unido a vibrar con él seguramente ya no abandonarán esta pasión durante el resto de años. Y junto a ese asentamiento social, la experiencia ha supuesto un gran aprendizaje que sólo se puede poner en práctica asumiendo retos.
Por algo dicen que, en matemáticas, la distancia entre el 0 (las temporadas en Primera Regional que tenía el club hace apenas 10 meses) y el 1 (la que está a punto de cumplir) es un conjunto numerable que puede ser considerado como infinito. A tenor de las sonrisas, lágrimas, emociones, lecciones, remontadas, chilenas, paradas, remates, abrazos y esperanzas que se han labrado esta temporada para el primer equipo y para todo el fútbol torrevejense no se puede negar que infinitas han sido las posibilidades que se han abierto. Gracias a lo aprendido, ahora queda culminar la campaña a la altura de las circunstancias y mirar al futuro con compromiso e ilusión.
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