Crónica de Antonio Sala Buades
Sí, descuiden ustedes; en efecto: hemos repetido el titular. Pero nos ha parecido la manera más precisa de resumir lo que ocurrió —también— en este encuentro, que como el del domingo precedente en Almoradí nos deja un amargo sabor por los dos puntos no sumados. Pagada la deuda pendiente con el calendario en esta devolución de la adelantada visita que nos rindió el Villena, hemos vuelto a ver un equipo, el nuestro, que ha echado por tierra un gran trabajo anterior, hasta el extremo de cambiar radicalmente de cara de un periodo al otro. Si tomar ventaja en el marcador era fundamental para el objetivo de la victoria, en estos compromisos —por diversas causas, entre ellas la anímica— no se está aprovechando la consecución de lo que en teoría es más difícil. No ha sido ahora porque no se haya atinado, y de espléndida manera, con la portería contraria. Sí ha sido, como hace siete días, por haber bajado el ritmo y haber cedido iniciativa, terreno y balón. En todo lo cual, sin duda, influyó decisivamente la jugada previa al intermedio: pocas veces un gol —no menos excelente— de los llamados «psicológicos» habrá hecho tanto honor a su etiqueta, espoleando a los unos y achicando a los otros.
En el primer tiempo, con el factor clave de la efectividad —sin ella, la impresión no habría sido tan positiva—, el Torrevieja fue un bloque muy distinto del que venimos viendo en las últimas jornadas. Perfectamente adaptado a las cortas dimensiones del campo Luiche, empezó a trenzar combinaciones rápidas e incisivas y por el camino establecido, partiendo desde atrás o recuperando en el medio campo. Como tampoco había problemas en defensa —recompuesta con la incorporación de Lewis como tercer central por la derecha—, se miró hacia arriba con más insistencia. La inspiración terminaría iluminando a Juampe y Manu Amores, protagonistas de la acción quizá más bonita —y efectiva, no se olvide— de la temporada. Cuatro minutos después, el propio Juampe recibió en profundidad de Beltrán y su intento de disparo en el área fue obstaculizado, entrándole por detrás, por Jordi. El primer susto, a los veinticuatro, nos lo dieron Benja con su pase vertical y el propio Jordi con su intento de remate, tapado por la oportuna salida de Buyo. Pero tal lance aislado no restaba méritos a los salineros, que aumentarían la cuenta en otra brillante jugada —ay, la efectividad, preciado tesoro— entre Beltrán y Juampe. Todo iba saliendo a pedir de boca.
Afrontábamos así el tramo final de la primera parte, en cuyos últimos instantes embocó Sergio un formidable disparo con el que los locales acortaban distancias… y metían las dudas en los visitantes. Seguramente el descanso, además de servir para reponer algunas energías, actuaría en éstos como fatal recordatorio del reciente acontecimiento. A los siete minutos de la reanudación, desde una posición similar, Beltrán intentó hacer lo mismo que Sergio, pero su lanzamiento directo salió un palmo por encima de esa misma escuadra por la que se había colado antes el balón. La diferencia entre que atine uno y no el otro y la viceversa, máxime en estas circunstancias, resultaría abismal: el Torrevieja se convirtió en un grupo medroso, más pendiente de un contragolpe que nunca se completaría —pese a algún que otro amago— que de mover la pelota, e incapaz de mantener la pugna ni siquiera igualada en la zona de los rechazos. Con los villenenses ganando casi todas las peleas al choque, aumentando su fluidez en la construcción y llegando más y más cerca del área, hilvanaron la acción de su segundo tanto, materializado por Raúl. La mayor preocupación para nuestros intereses radicaba en que, con las inercias tan claramente desfavorables, todavía quedaba casi media hora, un largo tercio del partido.
Público y jugadores olían la sangre. Los de Toni Solves se lanzaron a por la presa y trataron de consumar la remontada en los siguientes minutos. Sin embargo, el capítulo de ocasiones se cerró a los veintidós con un tiro, sin apenas ángulo, de Benja, bien tapado en el palo por Buyo, que rechazó con los pies. Entonces, cuando más a su alcance tenía el triunfo, el Villena fue desdibujándose; paradojas de la mente humana en general y de la futbolística en particular. Será que le entró el vértigo de tenerlo casi encima, o que ya no sentía la necesidad acuciante de marcar, o que temió verse sorprendido, o que… A este respecto, habrá que subrayar la labor, de otro tipo pero asimismo destacable, de los torrevejenses, que con sus armas restantes volvieron a igualar la lucha; al menos, a no complicarse demasiado en defensa. Incluso hubo algunos conatos ofensivos, fruto de la calidad o la fuerza, llevados por Beltrán y Mario, que no pasaron a mayores. Quién nos iba a decir, después del 0-2, que nos íbamos a conformar con otro empate, otro que se suma a la cuenta de este campeonato. Y es que nos está faltando algo; un algo que pudiera llamarse tranquilidad.
FICHA TÉCNICA
Categoría: Preferente Valenciana. Grupo: cuarto. Temporada: 2017-2018. Jornada: 19.
Estadio: Polideportivo Municipal (campo Luiche, césped artificial). Fecha: domingo 21 de enero de 2018. Hora de comienzo: 17.00.
Villena Club de Fútbol (camiseta azul, calzón blanco, medias azules): Martí, Jordi, Davito, Vicente, Sergio, Santa, Adrián Ibáñez (Rubén 68’), Wilson (Emma 77’), Raúl (Juanmi 69’), Benja y Adrián ©. No jugaron: Leo (portero) y Óscar. Entrenador: Antonio Solves Navalón.
Club Deportivo Torrevieja (camiseta blanca, calzón azul y medias blancas): Buyo, Vicente Boix, Mario, Borja, Vicente Zaragoza ©, Lewis, Ramiro, Booker, Beltrán (Santi 86’), Manu Amores y Juampe. No jugaron: Manu Vidal (portero), Ángel, Pablo Coria y Mani. Entrenador: Antonio Pedreño Saura.
Árbitro: Caballero Carrillo (José Carlos), de Benidorm, auxiliado por Devesa Anido (Borja) y Lloret Soriano (Gaspar). Amonestó a los locales Buyo (27’), Ramiro (44’), Vicente Boix (52’), Beltrán (69’), Antonio Pedreño (entrenador, 70’) y Borja (77’), y al visitante Jordi (60’).
Incidencias: Partido disputado en Villena después del acuerdo de permutar las fechas dispuestas en principio por el calendario, y haberse jugado el de ida (jornada 2) en Torrevieja. Se habilitó el campo Luiche, uno de los dispuestos en el Polideportivo Municipal de Villena, a causa del mal estado del césped natural de La Solana, que está siendo resembrado. Se encendieron los focos del estadio a los 39 minutos del primer tiempo. Wilson jugó con guantes en el segundo tiempo.
Goles: 0-1, 17’: Manu Amores dispara raso y cruzado a la base del poste derecho tras una buena combinación con Juampe, que le devuelve la pelota tocando de espaldas a puerta. 0-2, 29’: Juampe remata en salto estirando la pierna, en el segundo palo, un centro de Beltrán desde la derecha con efecto interior. 1-2, 45’: Sergio recibe en corto de Adrián en golpe franco y desde más de veinticinco metros coloca el disparo en la escuadra izquierda. 2-2, 62’: Raúl empuja a la red tras devolverle, desmarcado ante el portero, Wilson, que por la izquierda y en el área había arrancado solo al intentar la defensa visitante dejarlo en fuera de juego.
Descubre más desde Objetivo Torrevieja
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
Filed under: Actualidad, Deportes |
Deja un comentario