Ayer, a las 20:00, se celebró la inauguración de la calle. Esta estaba inicialmente prevista para el día anterior, pero las condiciones meteorológicas lo impidieron. La calle Vicente Blasco Ibáñez, en el tramo comprendido entre calle Apolo y Rambla Juan Mateo, se ha convertido como cada año en un homenaje al Día del Ausente, celebrado el 7 de diciembre de 1960 en la misma calle. En ella se pueden apreciar varios monumentos: una placa que manifiesta la ilusión de sus vecinos por seguir con esta tradición, una fuente coronada por la Purísima que se encuentra en la misma calle durante todo el año, una imagen de la Purísima de 4 metros de altura y un escudo de la ciudad. Toda esta decoración será visitable libremente hasta el Día de la Purísima. La calle contará con diversas actividades a lo largo de las fiestas patronales, como un concurso de paellas organizado por los vecinos el martes 6 y la noche golfa de los gigantes y cabezudos el miércoles 7. El acto contó con la presencia de la Reina de la Sal, las autoridades locales y la peña Arrós y Pulpo, encargada del montaje y la costosa elaboración de los monumentos de la calle. Desde este medio agradecemos su implicación en la conservación de las costumbres locales.
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