Objetivo Torrevieja

Álbum, pinchando sobre la foto

VÍDEO: Interviene Eduardo Dolón / Pinchar

La terraza del Real Club Náutico de Torrevieja acogido ayer, con la presencia de más de 500 personas, la visita de la candidata a presidir la Comunidad Valenciana en las elecciones del 28 de abril, Isabel Bonig. El acto se inició con las intervenciones de la número 15 en la lista para el Consell, la torrevejense Agustina Esteve y el actual vicepresidente de la Diputación y candidato a la alcaldía de Torrevieja Eduardo Dolón que embozó lo que sería su programa de gobierno en la ciudad y presentó a la que fue la protagonista de la tarde, Isabel Bonig. Con su conocido verbo disuasorio, atacante y controvertido, Isabel expuso en breve tiempo las líneas maestras de lo que será su actuación en caso de ser elegida presidenta de la Comunidad, algo de lo que está segura conseguir. Comenzó hablando que tres eran los ejes que más estaba repitiendo esta campaña. El primero de ellos es el tema económico, aspecto este que incidio que afectaba directamente a la creación de puestos de trabajo, y sobre todo de lo que supone una reducción de los impuestos tanto de transmisiones patrimoniales, como las herencias, que será de las primeras medidas que adoptará para que desaparezca en su totalidad y sobre el impuestos sobre la renta de que dijo que bajarán cuatro puntos porcentuales para que las familias dispongan de mayor capacidad de gasto.  El primero de ellos es un impuesto que grava discriminadamente a lo que puede suponer la economía de la ciudad y de la comunidad, la cual se encuentra sumida en un desconcierto económico, provocado, según ella por la gestión de un grupo que práctica lo que ellos tanto han criticado, cómo es la imposición de puestos en órganos de actividad e influencia política de la misma. Se refirió extensamente en segundo lugar a la sanidad, poniendo como ejemplo de eficacia a los centros que quedan concertados como son Vinalopó y Torrevieja, en primer orden y el desprestigio de las listas de espera que actualmente existen en los del resto de la comunidad. Destacando la mala gestión del gobierno del Titanic y que ella se compromete desde el primer momento a solucionar. Isabel con ese aspecto de luchadora, enfrentándose cara a cara a lo que ella supone justo no dejó títere con cabeza. El público aplaudió su intervención, sobre todo cuando habló de la discriminación lingüística de nuestra zona, en la que ella dijo defender que por supuesto éramos una comunidad privilegiada en la que contábamos con dos idiomas oficiales, pero que lo que no se podía imponer en nuestro ámbito, qué es castellanohablante, este tipo de cosas, sino que hay que hacer un programa en el que tanto el castellano, el valenciano y el inglés dispongan de unas facilidades de aprendizaje en las escuelas al mismo con tanto por ciento de formación que se pueda contribuir al progreso del esa juventud. Los aplausos cerraron su intervención en lo que supuso el primer gran acto de masas del Partido Popular.

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