Objetivo Torrevieja

El especialista en pediatría de Hospital Quirón Murcia y Hospital Quirón Torrevieja subraya que los regalos deben ser divertidos y servir para el desarrollo de la salud física y mental de los niños

Hospital Quirón – Torrevieja

La llegada de la Navidad es uno de los momentos más esperados por los niños. En ella, los juguetes son los mayores protagonistas, por ser el regalo más reclamado de los pequeños. Sin embargo, para los padres, esta época del año supone un momento de reflexión a la hora de elegir el más adecuado para sus hijos. Lo primero que deben tener en cuenta, tal y como destaca el doctor Manuel Baca, jefe de pediatría de Hospital Quirón Torrevieja y Hospital Quirón Murcia, es que “los juguetes deben ser divertidos y cumplir una función importante para el desarrollo de la salud física y mental de los niños”.
Jugar es un excelente recurso de diversión para todas las edades, que favorece la relación y comunicación entre los adultos, los niños y los adolescentes. A través de distintos juegos y juguetes se puede, además de educar y potenciar la creatividad de los niños, transmitir formas de vida saludable con el objetivo de combatir la obesidad infantil. La excesiva dedicación a los videojuegos o a la televisión puede generar hábitos sedentarios en los niños, que pueden acabar en el desarrollo de obesidad y todas las enfermedades asociadas a ella (diabetes, hipertensión, altos niveles de colesterol, etc.). Por ello, de acuerdo con el doctor Baca, “el juego debe convertirse en una fuente de salud y no en una dificultad para el bienestar presente y futuro del niño”.
El uso excesivo de la tecnología puede también afectar a la salud mental de los pequeños. En la actualidad, los videojuegos son el regalo estrella, forman parte de la vida de los niños y, con ellos, desarrollan facultades importantes como la psicomotriz dedo-mano y los reflejos. No obstante, según subraya el pediatra, “el uso incontrolado de los videojuegos puede crear adicciones llegando, en algunos casos, a perder la dimensión de la realidad e intensificar el riesgo de aislamiento social”.
Atención a las etiquetas informativas
En ocasiones, se regalan juguetes ruidosos que pueden llegar a ocasionar daños irreversibles en la audición de los pequeños, además de “generar incapacidad para concentrarse, ansiedad, irritación y mal humor”, como apunta el doctor Baca. Por ello, en la decisión paterna se debe tener en cuenta que sea conveniente para la edad de los niños, para que sepan utilizarlos, y no resulten peligrosos, de ahí que sea tan importante leer las etiquetas informativas que indican de qué materiales están hechos y su resistencia.

El número de regalos o buscar el juguete de moda para regalar son dos de las preocupaciones que también suelen tener los mayores. Los regalos navideños se han de utilizar para sacarle provecho a la educación del niño y para que este aprenda a aceptar las sorpresas. Tal y como subraya el doctor Baca, “los niños no se traumatizan por no tener el último juguete de moda ni por haber recibido cinco en vez de 10; simplemente necesitan tener claro que le han traído algo especial para él. Son los progenitores los que deben poner un límite al número de regalos, incluyendo los familiares”.

Jamás deben faltar los libros, ya que pueden ser considerados como auténticos juguetes por sus imágenes, colores atractivos y texturas, y, además, fomentan el gusto por la lectura desde la infancia.

Juegos al aire libre
En la sociedad actual, los niños pasan poco tiempo al aire libre, aunque “lo ideal es equilibrar la actividad y los juegos en el interior y en el exterior, para que desarrollen sus capacidades cognitivas, emocionales y físicas de forma adecuada, y se mantengan sanos física y psicológicamente”, aconseja la doctora María Luisa Mompó, especialista en la salud mental infantil de la Unidad de Pediatría de Hospital Quirón Valencia.

Los juegos en espacios abiertos estimulan la creatividad y la curiosidad infantiles, fomentan la autonomía de los pequeños, así como sus relaciones sociales, dándoles la posibilidad de interactuar con otros niños de su edad. “Jugar al aire libre, por lo menos una hora al día, proporciona además la posibilidad del ejercicio físico mientras se entretienen. Así tienen más espacio para moverse, correr, andar, saltar…lo que favorece el consumo de energía. Todo ello contribuye a mejorar su estado de ánimo y la calidad y cantidad del sueño”, continúa la doctora Mompó.

Por último, los juguetes deben ser seguros. “Los de tela deben contar con una etiqueta que indique que son resistentes a las llamas y que son lavables; la pintura no debe contener plomo; y en los que desarrollen actividades artísticas o manuales hay que evitar los materiales tóxicos”. La supervisión de los padres mientras sus hijos juegan e, incluso, su participación, son fundamentales para la diversión y el buen uso de los juguetes.

Decálogo para la compra de juguetes

1. Busque juguetes adecuados a la edad del niño.
2. Evite aquellos que pudieran ser peligrosos: lea las etiquetas informativas.
3. No son recomendables los videojuegos antes de los 9 años.
4. No son aconsejables los teléfonos móviles antes de los 12 años.
5. Prohibida la televisión y el ordenador para su habitación; estos dispositivos se deben compartir en familia, ya que los contenidos han de ser controlados por los padres.
6. No regale juegos, juguetes o videojuegos violentos.
7. No compre juguetes muy caros que después les prohibamos utilizar para que no los rompan.
8. No adquiera juguetes sofisticados que suelen resultar atractivos para los adultos, pero que no son útiles para los niños, ya que limitan su imaginación y les incitan a la contemplación y a la pasividad.
9. No facilite juguetes que fomenten roles sexistas en niños y niñas: tanto unas como otros deben jugar con todo tipo de juegos y juguetes. No hay juegos de unas y de otros.
10. Incluya siempre entre los regalos un libro.

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