Se rindió homenaje a las familias Moscardó-Barceló y Rodríguez, por poner a buen recaudo y cuidar de la imagen de la Virgen y su ajuar durante la guerra.
En la tarde de ayer del Viernes de Dolores, tuvo lugar en el Templo Arciprestal de la Inmaculada Concepción, la última jornada del Septenario que la Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores, que fue brillantemente clausurado por el Coro Arciprestal de la Inmaculada, con el acompañamiento al órgano y dirección de Aurelio Martínez López. El coro durante siete días ha interpretado la partitura tradicional de J. Ramón de Prado, que desde tiempo inmemorial viene sonando el Templo Arciprestal en la semana de Pasión. A continuación se celebró una Solemne Eucaristía, que fue oficiado por el párroco José Antonio Gea, que contó con la presencia del Presidente de la Junta Mayor de Hermandades y Cofradías de la Semana Santa, Francisco Beltrán Blanco, así como el Presidente de la Cofradía, Francisco Juan González Díaz, los miembros de su Junta Directiva de la Cofradía, así como los hermanos mayores Pepe Lorenzo, José Vicente Bueno y María José López Moscardó, junto a los ex presidentes José Bonilla y Vicente Moscardó y la camarera de la Virgen Ana Grau, contando además con la presencia de numerosos presidentes y cofrades de otras cofradías. En la misma se pidió por todos los difuntos de la Cofradía, participando en la ofrenda, lo más jóvenes de la misma.
La parte musical volvió a ponerla el Coro arciprestal de la Inmaculada, dirigido por Aurelio Martínez, con la interpretación de un cuidado repertorio propio del tiempo cuaresmal, con composiciones De Francisco Palazón, Alberto Taulé o del propio director Aurelio Martínez, del cual sonó el “Stabat Mater”.
Al término de la Misa, se entregaron las medallas a los nuevos cofrades y se quiso homenajear a las familias Moscardó-Barceló y Rodríguez, para darles las gracias, recordando que desde el origen de la existencia de la Virgen Dolorosa en el siglo XIX, fueron los encargados de resguardar, cuidar y ocultar, todo lo posible, lo relacionado con la Virgen en los años de guerra y gracias a ellos se pudo continuar hasta el día de hoy. Así Josefina Moscardó Blanco, Vicente Moscardó Blanco y Valentín Rodríguez Mercader, recibieron de manos del presidente de la Cofradía, sendos escudos de honor y una reproducción enmarcada de la imagen de la Virgen Dolorosa.
Descubre más desde Objetivo Torrevieja
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
Filed under: Asociaciones, Cultura |
Deja un comentario