La segunda empresa que salió del anterior también renuncia al servicio, lo que provoca prorrogar durante medio año el actual contrato
Francisco Reyes / La Verdad
La empresa que presta el servicio de limpieza de interiores de los edificios municipales y colegios de la ciudad, la mercantil Pau S.A., continuará al menos seis meses más desempeñando dicha labor, al haber renunciado a asumir la nueva contrata la segunda mercantil que quedó en el concurso público que se llevó a cabo para este servicio.
Las ediles de Contratación, Carmen Gómez Candel y la responsable de la limpieza de interiores, Lola Sánchez Roca, dieron cuenta ayer que ante la falta de empresas que hayan aceptado la contrata, se deberá iniciar desde el principio un nuevo expediente de contratación y pliego de condiciones, con el fin de adjudicar el servicio. Por ello la actual, que resultó en un principio ganadora de la contrata por un precio anual de 1.550.000 euros, aunque después no logró presentar la documentación pertinente en tiempo y forma, se hará cargo del servicio durante un tiempo máximo de seis meses, que es el periodo transitorio que se prevé hasta que se resuelva esta situación.
Tanto los técnicos municipales como el gobierno municipal del PP e incluso el Comité de Empresa de trabajadores, han estado de acuerdo en que Pau sea quien preste este servicio, entre otras cosas porque es la mercantil que tiene contratadas a las 91 personas que desempeñan su labor.
Tras no ser aceptada la oferta de Pau en un principio, se decidió pasar la adjudicación a la siguiente concursante, representada por la empresa Mantenimientos Cascales, por un total de 1.559.000 euros al año.
Según explicaron las ediles Gómez y Sánchez, el Ayuntamiento dio el viernes un ultimátum a la segunda empresa, que tampoco había presentado la documentación correspondiente, y ésta les anunció que no asumiría el servicio. De esta manera, el servicio de limpieza de edificios públicos se amplía medio año más, durante el tiempo que se prevé dure el proceso administrativo de la configuración del nuevo pliego de condiciones, y en el que a pesar de ser prácticamente el mismo «se rectificarán algunos aspectos», según reconoció la edil de Contratación, Carmen Gómez.
La concejal indicó además que la empresa que se haga cargo del servicio, tendrá que subrogar la cantidad de empleados que hay actualmente, de manera que si en el momento de iniciarse el nuevo pliego, la cantidad de trabajadores hubiese descendido por cualquier motivo, la empresa debería completar la plantilla hasta los 91 operarios actuales.
La concejal de Contratación se refirió también a «la naturaleza impecable» del pliego de condiciones que no ha logrado cumplirse. En este sentido dijo que «se ha querido provocar una alarma social que no existe» e insistió en que debe cumplirse con la subrogación del número total de trabajadores.
La empresa Pau ha aceptado hacerse cargo del servicio durante este tiempo provisional, recibiendo por ello la misma contraprestación económica que venía obteniendo antes del nuevo pliego, a pesar de lo cual Gómez incidió en que «no se trata de una prorroga, si no de un acuerdo que es perfectamente compatible con la legalidad vigente». También destacó la capacidad de reacción que se ha tenido «porque se trata de un servicio que hay que dar de todas formas», al tiempo que señaló que el plazo de los seis meses dio comienzo ayer, ya que estaba previsto que la nueva contrata hubiese comenzado a desempeñar su función el pasado viernes.
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