En la mañana de ayer un Auditorio Internacional de Torrevieja, reconvertido en sauna, por una inoportuna avería en el sistema de aire acondicionado, acogió el que hasta ahora podemos calificar como el concierto mejor ejecutado de todos los que ha dado en su ya largo recorrido la Joven Orquesta Sinfónica de Torrevieja, bajo la batuta de Adolfo Arronis.
El concierto arrancó con la fuerza del pasodoble “Suspiros de España” de Antonio Álvarez, continuando con “Farandola” y la suite de “Carmen” de Bizet. Para continuar con un programa entretenido en el que interpretaron un fragmento de la zarzuela de Federico Chueca “El Bateo”; “Las Leandras” de Francisco Alonso y “Danzón”, para cerrar el programa oficial con la banda sonora de “Piratas del Caribe” de Klaus Badelt. En el transcurso del concierto, la JOST estrenó la obra pata metales “Festival de Júpiter” de Iván Esparcia que se encontraba presente entre el público.
Entre los asistentes que presenciaron el concierto se encontraban la concejal de Residentes Internacional, Gitte Lund Thomsen, la presidenta de la Asociación Ars Aetheria, Mamen Mateo y el anterior presidente de la Asociación, Pelayo Mellado.
Conforme iba transcurriendo el concierto la temperatura iba subiendo, tanto la del concierto en sí, como la ambiental, hasta el punto de pedir el propio público al director de la banda que se despojara de la chaqueta para continuar, al comprobar cómo sudaban la gota gorda el propio director Adolfo Arronis y los músicos que acabaron agotados.
Esta tarde JOST llevará el nombre de Torrevieja y su arte a la población de Hondón de los Frailes
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Que pena conservación de este lugar donde no se puede consentir estás anomalías a nuestros melómanos y menos a nuestros musicos