Los trabajadores públicos de Torrevieja realizaron ayer por la mañana un parón. Esta primera pausa, que se produjo sobre las 12 del mediodía, fue la primera, después del anuncio del presidente del gobierno, Mariano Rajoy, sobre las nuevas medidas que afectarán directamente a los funcionarios. A las puertas del consistorio de la localidad salinera se reunieron cerca de sesenta empleados de distintas áreas, como urbanismo, el Prop, o el propio ayuntamiento de la localidad, aunque, al parecer, los funcionarios también cuentan con el apoyo de otros compañeros, policías locales o miembros de la brigada verde. La salida a la calle de ayer, servirá para comprobar la capacidad de reacción de los trabajadores públicos de Torrevieja ante próximas convocatorias de movilización.
Manuel Lucas Aldeguer, representante de la junta de personal, declaró ante los medios que están “hartos de ser siempre los que pagamos el plato”. El funcionario, manifestó que en el periodo de bonanza económica, los sueldos de los empleados públicos se mantuvieron, mientras que encofradores o fontanero cobraban cerca 6000 euros. Sin embargo, comentó que: “ahora que llegan de nuevo las vacas flacas, nos toca a nosotros apretarnos el cinturón”.
Los funcionarios de Torrevieja estudiarán participar en las movilizaciones que se produzcan en otras ciudades, porque, según el propio representante: “si nos separamos no vamos a conseguir nada”. De esta manera, los empleados de la ciudad están decididos a actuar acorde a lo que se acuerde a nivel nacional. Lucas Aldeguer, también anunció que los sindicatos ya están convocando una manifestación el día 19, a la que él asistirá y sí es necesario, fletarán autobuses para hacer el mayor ruido posible ante lo que consideran un ataque brutal a los funcionarios.
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