La Banda de Música de la Sociedad Musical Ciudad de Torrevieja “Los Salerosos”, encabezada por su presidente, Guillermo Hernández, puso ese punto de alegría que nos ha robado la pandemia en estos tiempos, y que los materos y visitantes, en el día grande de las fiestas de Nuestra Señora del Rosario, agradecieron con sus aplausos. Ni un solo punto de la pedanía dejaron de recorrer, para llevar sus notas marcadas de pasodobles, marchas y canciones de ayer y de siempre a cada rincón, contribuyendo así a realzar unas atípicas fiestas, que gracias a la buena respuesta de la gente y una marcada responsabilidad ante el covid-19, se han podido celebrar. Los Salerosos quisieron homenajear la memoria de dos grandes materos como son Eduardo Gil Rebollo y el Tio Soto, tocando unas piezas frente a sus domicilios.
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