Desde la caída de la tarde de ayer, los más jóvenes y no tan jóvenes torrevejenses, preparaban sus “bártulos”, para acampar en cualquiera de las playas autorizadas, para recibir el día de San Juan, con el ancestral rito del fuego purificador en una noche que se desarrolló sin incidentes. En las playas de La Mata, Los Locos, El Cura y los Náufragos, bajo la atención del complejo despliegue de seguridad, con la Policía Local, Guardia Civil y Protección Civil montado por el Ayuntamiento, a fin de que no se introdujera en las playas maderas que no fueran las facilitadas por el propio Consistorio, que repartió más de 15.000 kilos. En las playas del municipio, se daba cuenta de las viandas que se habían preparado en las brasas de las hogueras que poblaron por un noche toda la costa torrevejense.
Una de las playas donde el ambiente fue más intenso, fue sin duda, la de los Náufragos donde las ganas de celebrar esta noche, hicieron que no cesaran de divertirse, saltar las hogueras e incluso bañarse hasta que a la hora marcada de las dos de la mañana cuan cenicientas “ahumadas”, debieron abandonar las playas, para que pudiera acceder el servicio de limpieza y hoy poder “lavar” la resaca” en un ambiente playero acogedor.
Junto a las fuerzas de seguridad estuvieron al “pie del cañón” tanto el concejal de emergencias, Federico Alarcón, el de Playas, Antonio Vidal y la concejal de Aseo Urbano, María José Ruiz, junto al Intendente de la Policía Local, Vicente Gutiérrez, el Comandante de la Guardia Civil, Snbtos Buendia García y el Jefe de Protección Civil, Enrique Pizana.
A la fiesta de la noche de la magia y los misterios, no faltó nadie, desde los más jóvenes, a la vecina del cuarto que te encuentras cada día en el rellano, bailando como posesos alrededor del fuego. Una noche hecha para “cagarse” literalmente en la crisis, la “inflación”, la “gasolina” o “el precio de la luz”.
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