Objetivo Torrevieja

“Objetivo Torrevieja”, les ofrece de primera mano y en primera persona la gran aventura que un grupo de chavales del IES Libertas de nuestra ciudad están viviendo en Polonia.

Redactores y asesores del “Diario”: Cristina Karlsen, Aida Iglesias, Enrique de Villamor Saraluce, Paula Caselles, Ellie Booker y Claudia Arribas.

Álbum, pinchando sobre la foto

…Se inicia la aventura
Lunes 26 de Marzo: Mis compañeros de expedición y yo, que habíamos quedado a las 11.30 de la noche nos disponíamos a salir desde la plaza del Ayuntamiento de Torrevieja hacia el aeropuerto de Alicante. Para este viaje se prestaron varios padres de alumnos. Como era muy pronto para facturar, nos sentamos en el suelo formando un círculo. Jugamos durante varias horas a pasarnos una botella, al escondite, hablamos de muchas cosas, y por último jugamos con los carros para transportar maletas, haciendo carreras por el aeropuerto. En una de las nuestras, mi magnífico amigo Kerman nos llevó a Cristina y a mi en el carro para hacer una carrera contra Mate. Ya a punto de alcanzar la victoria, se produjo un pequeño accidente contra una máquina expendedora, afortunadamente sin consecuencias que reseñar.
Mi primer viaje de estudios con mis compañeros. Una expedición educativa en Polonia, emocionante para mi y más para quienes volaban por primera vez. El viaje hasta Cracovia se hizo largo, pero mereció la pena porque es una ciudad maravillosa con paisajes preciosos, un clima increíble (el mes pasado alcanzaron los 40º bajo cero, y hoy estamos a 5º). Al llegar al hotel cansados ya después de estar 24 horas despiertos y hambrientos nos recibieron con una comida deliciosa que nos devolvió la energía. Nos espera una semana con muchas sorpresas y aventuras en Polonia .
Al final son 21 los expedicionarios que viajan a la región de El Tatra para la práctica de deportes de montaña y aire libre, y la profundización en conocimientos de la cultura e historia europeas. 19 alumnos de 4º de E.S.O. y Bachillerato, y dos profesores de Geografía e Historia y de Educación Física.
Nuestro primer día en Polonia ha comenzado en el mismo avión, donde tres alumnos han sido invitados por el Comandante de Ryanair para visitar la cabina de vuelo una vez aterrizados. Esto se ha debido a que una de nuestras expedicionarias era la primera vez que volaba. Por motivos de seguridad no quedan fotos ni vídeo del momento.

Inmediatamente hemos comenzado nuestro programa cultural e institucional, con la visita al Museo de la AK (Ejercito Nacional Polaco), donde hemos sido recibidos oficialmente por su Director, Pana Adama R?palskiego, que muy emocionado ha aceptado un obsequio en nombre del Ayuntamiento de Torrevieja, y una invitación formal a visitar nuestra ciudad. Tras la visita enriquecedora al museo, nos hemos desplazado 100 Kilómetros al Sur, hasta la localidad de Zakopane donde nos hemos instalado en el hotel después de una excelente comida.

La tarde ha sido provechosa: Reunión de organización de grupo, distribución de habitaciones, reparto de materiales y equipamiento de la expedición, cedido por instituciones y por patrocinadores (polo, sudadera, etc…), y visita a la Ciudad de Zakopane, donde hemos podido cambiar a la moneda local (1€ son 4 z?otys y 12 grosz – el céntimo del z?oty), y conocer las tradiciones locales en cuanto a establecimientos de hostelería. Aquí son muy populares las parrilladas en los bares, y la música folklórica en directo.

Hemos terminado la tarde jugando con la nieve, que hay mucha para ser tan tarde en la temporada de invierno, y hemos visitado un hotel premiado por su singular diseño ya que está fabricado íntegramente en madera (incluso las tejas), y del que los alumnos expedicionarios no se han cansado de admirar y hacer fotos.

Miércoles 28 de Marzo: Los expedicionarios Tatra hemos ido a hacer un día de senderismo. A las 9 de la mañana ya estábamos preparándonos para salir. Antes de partir, nos han enseñado qué hay que llevar en la mochila en distintas situaciones para ser lo más prácticos posible y después hemos cogido el autobús para dirigirnos a los montes Tatra, concretamente al famoso Valle de Chocholowska, donde se reunieron para tratar de la creación de las bases de la democracia en tiempos del comunismo, en 1983; el Papa, ya beato, Juan Pablo II y el presidente del Solidarnosk, Lech Walesa.

Al llegar allí, el instructor de montaña que nos acompaña en el viaje, José María Genís, nos ha dado una charla de orientación con mapas del lugar y nos ha enseñado el manejo básico de la brújula, algo que profundizaremos otro día. El camino de ida hasta el refugio ha durado aproximadamente 4 horas y durante el mismo, nos sorprendió encontrarnos con un camino lleno de nieve y hielo, además de un paisaje espléndido.
También nos encontramos con un matrimonio mayor que estaba haciendo quesos con la leche obtenida de sus cabras e insistió que a la vuelta fuéramos a ver a las cabras y la organización nos compró 21 piezas de quesos.

Seguimos caminando hasta que finalmente, después de un montón de fotos, llegamos al refugio donde comimos y practicamos nuestro vocabulario polaco.   La vuelta fue mucho más rápido, ya que, para entretenernos empezamos una guerra con bolas de nieve donde nos empapamos pero no nos importó porque que nos divertimos mucho. Al estar cerca del autobús nos acercamos a ver las cabras y les dimos de comer.

Una vez en el hotel nos dio una conferencia el vicepresidente de la AK (Armia Krajowa), Sr. Comandante Stanis?awa Szlagora, que nos contó como vivió durante la II GM. Con tan sólo 17 años fue miembro de la resistencia polaca frente a los nazis, que más tarde se transformó en la  AK. Entre otras cosas, su labor consistía transmitir mensajes entre los miembros de la resistencia, buscar y descubrir a los espías polacos aliados de los nazis y más tarde ayudó a los fugitivos que huían de los nazis trabajando como portamaletas en la estación de tren. Y nos contó una anécdota en la que robó a los alemanes una radio, que estaba prohibida, para facilitar la comunicación entre la resistencia y los aliados. Tras muchos periplos evitando a la GESTAPO, consiguió llegar a casa y, al intentar esconder la radio, descubrió que había otra radio de la cual desconocía su existencia. Amelia Grau. Cracovia.

Jueves,  día 29 de Marzo: Nos hemos levantado a las 8 de la mañana (ya hemos cogido el ritmo), hemos desayunado a las 8:15 y Juan nos ha dado un margen de tiempo para preparar las mochilas y coger todo lo necesario para el día de hoy.  Tras una hora de viaje en el autobús , por fin llegamos al
Castillo de Niedzica , al llegar nos hicimos muchas fotos por el maravilloso paisaje que nos rodeaba.
Entramos al Castillo y nuestra guía turística nos enseñó el lugar y nos explicó cada una de las salas y la leyenda del Curro Jiménez polaco, Janosik (se lee yanosik), quien fue arrestado, encerrado y torturado en los calabozos del Castillo de Niedzica (territorio Húngaro en Aquella época). El tal Janosik enamorado locamente de su amada Marina, llego a escapar por dos veces consecutivas, la primera excavando en la pared de piedra y roca y la segunda tumbó a golpes el portón de roble del calabozo. Se dice que era un hombre de fortaleza sin igual y de generoso corazón, por lo que en su huida fue ayudado por las personas que habitaban aquellos lugares. Se dice que Janosik una vez se reencontró con su amada volvió a tierras del Tatra Eslovaco de donde era originario para pasar junto a su amada el resto de sus días.
El Castillo de Niedzica se encuentra en lo que fue territorio Húngaro , la propiedad del Castillo fue ostentada por familias nobles húngaras hasta el año 1943, a partir de ésta fecha fue usado y ocupado por los ejércitos nazis y después por el gobierno comunista, ambos practicaron el pillaje, de tal manera que hoy solo se conserva como mobiliario una cómoda del S. XIV original y una mesa de comedor del S. XIX…….
Al salir del Castillo nos dirigimos a una iglesia construida en el S.XV ,  la más antigua de Polonia, catalogada por la UNESCO como bien protegido y patrimonio de la humanidad, en su interior se encuentran importantes policromías del S.XIV. Esta iglesia se encuentra dentro del circuito de la arquitectura de madera. Comimos muertos de frío aunque con breves rayos de sol y al poco tiempo nos dirigimos a la ciudad de Zakopane , donde visitamos el cementerio  Peksowy Brziszku  y la Antigua Iglesia, llamada también de las Clementinas por pertenecer el suelo en el que se construyó donado por la descendiente, Clementina, en el año 1840, del Conde Homola, quien fue propietario único de todo el Tatra Polaco (Cárpatos). Esta iglesia es protegida por la patrona de Polonia la Virgen de Chestochowa.

En este pintoresco cementerio, visita obligada de turistas en Zakopane, sólo yacen las sepulturas de hombres singulares que hicieron cosas importantes y altruistas para Zakopane, como artistas, arquitectos,  correos de la resistencia y grandes guías de montaña que ayudaron a mucha gente durante la II Guerra Mundial, así como académicos de la lengua, poetas ….. y gentes de muy buen corazón amantes de la naturaleza y del Tatra.

Y después de un rato de turismo cultural, nos dejaron tiempo “libre” (¡por fin!) para poder hacer compras de recuerdo o regalos, y pasear en grupos por la cuidad de Zakopane . Mientras hacíamos nuestras compras empezó a caer lo que parecía granizo y acabó siendo mucha nieve, y nos hicimos muchas fotos mientras disfrutamos del paisaje y del ambiente que había a nuestro alrededor . Al cabo de un buen rato de compras nos fuimos al autobús para ir al hotel.

En el hotel, el Comandante concluyó la conferencia sobre ocupación nazi. Los alumnos, a lo largo del día de hoy, han comprendido en cierto modo que la vida de un anciano que vive en el Tatra puede ser realmente enriquecedora cuando te das cuenta de que es un libro viviente sobre la II GM. Las anécdotas de la vida del Comandante parecen historias contadas a sus nietos, y sin embargo en cada una de ellas se jugaba la vida uno u otro miembro del ejército de resistencia. Ahora con 90 años, el Comandante nos acompaña durante dos días, ya que le ha encantado el proyecto que llevamos a cabo, y se viene con nosotros en autobús, come con nosotros en el hotel… disfrutando cada momento.

La anécdota del día es curiosa. El Comandante Szlagora, sobrevivió a infinidad de situaciones peligrosas, incluso fue llevado a realizar trabajos forzados durante un tiempo, porque los polacos “estaban por debajo de los animales en la escala de consideración”. Terminada la guerra, retomó sus estudios de arquitecto, profesión que desarrolló durante la época soviética. En este periodo, siguió siendo miembro activo de la AK, denunciando entre otras cosas, que fue obligado a diseñar, como parte de un hotel de lujo, “habitaciones escucha”, que eran habitáculos preparados para espiar a los huéspedes de las habitaciones de lujo de dicho hotel, una práctica típica soviética.

Tras la cena, con sopa de pepinillo, hamburguesa de pollo con patatas y ensalada de pepino con tomate, Chema se ha arrancado a cantar temas clásicos españoles que han sido del agrado de los polacos que nos acompañan. De hecho, incluso han llamado a familiares para que escucharan temas que estábamos cantando, canciones de la tuna, canciones pop actuales, y por supuesto, una habanera torrevejense, con algunas lagunas en la letra, pero muy buena entonación (hay documento en vídeo).

Y hemos finalizado  este día tan especial, con una nevada de lujo que ha comenzado antes de la cena, y que a la hora de terminar este informe aún sigue cayendo. Bajo esos copos y en el frío del Tatra, un grupo de 15 voluntarios con 2 profesores y el monitor de montaña, han realizado una actividad de senderismo nocturno hasta una cota media. Ha sido imposible resistirse a una permanente batalla de bolas de nieve, que ha durado desde que hemos salido hasta que hemos regresado. Edición del informe, duchas, primera reparación de un dedo “torcido” y poco más. Mañana veremos con tanta nieve cómo adaptamos el programa para aprovechar al máximo este regalo que nos encontramos a finales de marzo. Interrupción temporal de la conferencia de hoy, a causa de la nieve. Uno de los conferenciantes, Don Robert Springwald, vicepresidente de la fundación Tadeusza Kosciuszki w Krakowie, se suma al grupo en la foto. (Enrique de Villamor, nuestro guía e instructor personal sobre cultura polaca, y nuestro contacto con las instituciones). Cenando en el Hotel Harnas 2

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