José Antonio Bonilla,
Concejal socialista Ayuntamiento de Torrevieja
Decía el Presidente Sánchez, a colación con las elecciones de este mes de julio: “sé perfectamente que a todos nos coge cansados”. Lo sé de sobra porque, apuntó, se acercan las vacaciones que serán las primeras “completamente” normales tras el fin de la pandemia y se necesita “descansar y desconectar”. Dijo que lo entendía y que se hacía cargo, pero que “lo que se decida el 23 de julio será decisivo para España porque el resultado tendrá efectos sobre las vidas de la mayoría social de españoles durante esta década y la siguiente”.
Y razón no le falta al Presidente, porque en estos últimos días al PP se le ha pegado un tufillo a extrema derecha y populismo que veremos a ver cómo logra desprendérselo. En efecto, el Sr. Feijóo no se cansa de repetir con orgullo y arrogancia que va a derogar el “sanchismo”, a lo que debemos preguntarnos si eso supone “suprimir” el Ingreso Mínimo Vital, la ley de muerte digna, la Ley de Vivienda, la histórica subida de las pensiones, o “derogar el aumento del salario mínimo y volver a los 735 euros de Rajoy”. No nos dejemos engañar, un gobierno de “extrema derecha y derecha extrema” sería nefasto para España, sería retroceder varias décadas en cuanto a todos los derechos conseguidos hasta ahora.
A todo ello, vamos a añadirle el “complemento” de Vox, para dar lugar a una coalición de extrema derecha y derecha extrema, en materia de derechos de la mujer, de los trabajadores, en derechos humanos, o de libertades, democracia y convivencia.
Pero lo más significativo que en sus discursos obvian que en España jamás se habían presentado unos valores de ocupación y afiliaciones a la Seguridad Social tan alto o que tenemos el mayor crecimiento económico y el precio más bajo de la electricidad de la zona euro. Y todo ello, en una época que se ha tenido que lidiar con una pandemia de efectos terribles sobre la salud, economía y trabajo y una guerra de repercusión tremenda sobre Europa. Pero el Gobierno del PSOE ha sabido manejar adecuadamente la situación, como así ha sido reconocido por grandes líderes y economistas mundiales.
“No podemos permitirnos el lujo de retroceder ni un centímetro”, ha avisado Pedro Sánchez, que ha negado las tesis de que haya un “cambio de ciclo” electoral “como si el futuro estuviera ya escrito”, y ha pedido el “mayor respaldo social” para que en los próximos cuatro años haya un gobierno “fuerte capaz de hacer de España uno de los países más avanzados y prósperos, frente a otros que se definen por lo que se plantea derogar”. Así que, ánimo y a movilizarnos para salir a votar el 23 de julio. El futuro del país está en nuestro voto.
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