Objetivo Torrevieja

Víctor Ferrández Esteve

Licenciado en Ciencias Políticas y miembro del Consejo Político de IU Torrevieja

Víctor Ferrández

Ha terminado el año más desastroso de la historia democrática española, el año más destructivo para los derechos y el bienestar de los ciudadanos y ciudadanas de nuestro país y de nuestro municipio; no se recuerda nada igual. Son tantos y tan diversos los ataques, que muchos y muchas nos estamos acostumbrando por un lado, y amedrentando del miedo por el otro, y esto es muy peligroso. Pero el despropósito más peligroso es la comodidad y el descaro en el que se han posicionado quienes gobiernan al dictado de los mercados financieros que, escudados en la impunidad que les otorga una “legalidad” forjada a base de una campaña electoral de mentiras y un programa electoral de papel mojado, ejecutan un plan minuciosamente maquinado para destruir paulatinamente todo lo que hasta ahora nos recordaba que tenemos derechos, que no sólo votamos cada cuatro años, que estamos en democracia. Hasta el punto de que se nos está olvidando que en democracia, el que gobierna debería ser del pueblo y está obligado a gobernar para el pueblo. Por tanto, creo que el propósito más importante para este año debe ser superar la resignación y despertar, cabrearse, levantarse e ir hacia delante, todos juntos y unidos. Nuestro propósito debería ser recordar que somos el pueblo y que sin nosotros y nosotras los políticos no son nada, porque el poder está en cada uno de nosotros. Eso significa a soberanía popular. Pero antes hay que perder el miedo a perder el trabajo, la tarjeta sanitaria, la casa, el coche, a que nos detengan en una manifestación…Quieren que el miedo nos paralice, que creamos que si no protestamos la cosa no irá a peor. Nada más allá de la realidad; si nos paralizamos nos robarán con más facilidad. Por ello, perder el miedo debe ser el primer propósito. Perder el miedo y concienciarnos de que el pueblo no debe temer al gobierno, sino que son los gobernantes los que deben temer al pueblo. Nada más y nada menos, sus despropósitos han provocado nuestros propósitos para 2013. Por lo demás, os deseo un año en el que la lucha que cada uno de nosotros y nosotras tiene que librar cada día para salir adelante esté lleno de éxito. Pero para tener éxito no podemos hacer la guerra cada uno por su lado, sino juntos, organizados y comprometidos, ya que solo colectivamente, uniendo el trocito de soberanía que emana de cada uno de nosotr@s, seremos capaces de recuperar las riendas de nuestro futuro y salir adelante, de prosperar el próximo año. Y para terminar, más que un propósito, quiero expresar un deseo personal. Primero, que todos los amigos y amigas que he despedido en 2012 estén bien allí dónde estén ganándose la vida, y segundo, que en 2013 no tenga que despedir a más amigos obligados a emigrar para salir adelante y prosperar en la vida. Esto sería una buena señal para tod@s, cada emigrante no es un desempleado menos en la lista del paro, no es la pérdida de mano de obra, ni siquiera el consiguiente subdesarrollo que ello conlleva y pone en entredicho el futuro de nuestra sociedad, cada persona que tiene que emigrar, engrosando este éxodo migratorio, es un amigo, un familiar o compañero que se va, que tiene que dejar su vida y sus raíces para partir ¿Vamos a permitirlo? Luchar por los propósitos de los de abajo será provocar despropósitos para los de arriba. Feliz año y próspero año nuevo para el pueblo

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