Álbum, pinchando sobre la foto
Ayer domingo día 13 de marzo, se cumplían 30 años en que el matrimonio procedente de Italia, Salvatore Schinello y María Zabatta, con sus dos pequeñas hijas, Lisa y Daniela, decidieron convertir Torrevieja en su nueva patria, en su nueva esperanza,… en su futuro.
Pero estos treinta años dan para mucho, y tanto que aquellas cuatro personas que llegaron a la ciudad, hoy se han convertido en una gran familia donde “nonni” Salvatore y María, adoran a sus cuatro nietos, Alma y Dylan, fruto del matrimonio de Daniela con Javier Cuartero y Allegra y Gianluca, hijos de Lissa y Andrés Marcos.
Ayer nos acercamos a felicitarlos personalmente y aunque según nos confesó María, la celebración se ha visto empañada por la situación bélica de Ucrania, se sentían muy felices de poder compartir su pueblo de adopción, tanto como le han dado. Muchos amigos y clientes fueron los que quisieron compartir ayer unos momentos en los que la estrella gastronómica fue una tarta gigante que pudieron degustar todos.
Y es que esta familia tan querida por nosotros y por Torrevieja, siempre ha devuelto el mil por cien de lo que que les han dado. No hay asociación, o gente que los necesite que pueda decir que alguna vez no han colaborado con ellos., ni nadie que no haya encontrado consuelo y cariño en esta familia.
Por eso no nos queda más que desearles que sean otros 30 años más y otros 30 los que vivan tan felcices como ahora y que ese espíritu de torrevejenses, amables y solidarios como siempre sea su bandera, la única que traspasa todas las fronteras.
Esta es la historia de familia Schinello
… Erase una vez, que Salvatore un italiano, nacido en Dinami (Reggio Calabria), justo en la punta de la bota de la península italiana, decidió emigrar a Alemania, a la ciudad de Freiburg. Allí conoció a María Zabatta, también italiana y con un próspero futuro de empleada de banca. Pero los dardos de Cupido son inescrutables y allí se casaron y tuvieron a sus dos hijas, Lissa y Daniela. Pero un verano, visitaron la casa familiar que sus padres tenían en La Mata, … y a la que habían visitado en otras ocasiones, pero aquel verano, fue especial.
Pensaron que lo mejor era dejar las frías tierras teutonas y comenzar una nueva aventura en Torrevieja. Salvatore, entonces viajo a Venecia y durante meses estuvo tozudamente aprendiendo los secretos de las mejores pizzas, para intentar ponerlas en práctica en nuestra ciudad. Así que “ni tontos, ni perezosos”, llegaron a Torrevieja y el 13 de marzo de 1992 inauguraron su primer local en la calle Ramón y Cajal, 16. ¡Qué recuerdos!, en aquella época esa calle y las adyacentes eran el punto de encuentro de toda Torrevieja, … no era necesario ni quedar, ibas a Ramón y Cajal y allí te los encontrabas.
Ya asentados y tras el éxito de su primera ubicación, en el año 1994 se instalaron en la playa del Cura, en la Avda. de los Marineros, numero 1, hasta que ya en 2011 se hicieron con el local que hoy en día es santo y seña de la playa del cura en la ciudad, en Avda. de los Marineros, 4, y que comunica con la Avda. de la Purísima. Un local que a día de hoy recibe las visitas de numerosos comensales que pueden deleitarse no solo las pizzas sino con un surtido de menús de primera categoría para todos, deleintándose con las incomparables vistas al mar de su terraza
Las vicisitudes de la familia Schinello hasta llegar a su actual emplazamiento definitivo en la popular Playa del Cura, Avda. de los Marineros, 4. Pues bien este establecimiento, no fue el primero, y con motivo de su 25 Aniversario se reformó totalmente, sobretodo su parte externa, su terraza y algunos detalles del interior, para hacer más acogedora y cálida vuestra presencia y la de todos aquellos que quieran compartir un bello atardecer mediterráneo en su amplia terraza, que disfruta de una luz excepcional
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