El lunes 23 de febrero no fuimos noticias a causa del movimiento brusco de la Tierra (con mayúsculas, ya que nos referimos al planeta), causado por la liberación de energía acumulada durante tiempo.
Imagen de San Emigdio en el Parque de las Naciones de Torrevieja
Encarna Hernández Torregrosa
Solo algunos en esta zona notaron el seísmo de magnitud 5,2 con epicentro cerca de la población manchega de Ossa de Montiel y que sacudiendo el centro de la Península Ibérica. Pero sí, fueron muchos (cuando se conoció la noticia) los que seguramente se acordaron de San Emigdio patrón de los terremotos. La pequeña imagen que se encuentran en la parroquia de la Inmaculada últimamente está teniendo un gran protagonismo. Es sabido que fue un obispo cristiano venerado como santo y mártir nacido en Tréveris en 279, llegando a ser obispo de Ascoli Piceno.
Hace catorce días, el 11 de febrero, un seísmo de magnitud 2,1 en la escala de Richter se registro, con epicentro en el mar, a unos diez kilómetros al sureste de la costa de Torrevieja. Solo cuatro días antes de que llegara al Templo Arciprestal de la Inmaculada Concepción, la reliquia de San Emigdio, el domingo 15 de febrero.
La relación entre el personaje nacido en Alemania y los temblores de tierra parte del año 1703. En esta fecha se produjo un violento terremoto que devastó numerosas poblaciones de la región italiana de las Marcas, pero dejó intacta a la ciudad de Ascoli Pizeno. En este punto el culto a San Emigdio ya se remontaba al siglo VIII. Tras el suceso muchas poblaciones lo erigieron como su patrón y levantaron iglesias en su honor. Un siglo más tarde en nuestra zona, la Vega Baja, cientos de personas lo invocarían para que cesaran los seísmos que tuvieron lugar en 1829, y sobre todo los sufridos en Torrevieja, Almoradí o Benejúzar, poblaciones que tuvieron que ser reconstruidas. Sin duda el 21 de marzo es y será una fecha histórica que marcó el devenir de la Vega Baja. El terremoto asoló media comarca y la otra media quedó marcada por el temor a nuevos episodios sísmicos. Gracias al trabajo de la asociación de investigadores Castrum Altum se puede venerar la reliquia del santo italiano en Catral, Torrevieja y Almoradí. Incluso una delegación de Ascoli Piceno viajará a la Vega el 19 de marzo para devolver la visita.
Cada vez que el subsuelo tiembla en la Vega Baja, y en los últimos meses se ha podido comprobar en varias ocasiones, cientos de vecinos se encomiendan a San Emigdio. Han pasado casi dos siglos pero la devoción se mantiene intacta en poblaciones que han cambiado su aspecto por completo con el paso del tiempo. Pero el 23 de febrero, todos sentimos cierta angustia ya que de nuevo la Tierra tembló. Solo que esta vez, quizás por influencia de San Emigdio, la Comarca no ha sido noticia. La noticia fue… que no hubo noticia.
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