Quedan algo más de 130 días para finalizar el año. Y Torrevieja como ciudad anclada en el futuro, tras tomarle el pulso en esta deliciosa primera quincena de agosto que está apunto de marcharse (eso de primera quincena de agosto me suena a casa de alquiler veraniego…) nos deja un buen número de visitantes que se han podido ver por calles, plazas y sobre todo playas. Y cuantos vienen a veranear, además de pasar unos días de descanso, olvido de lo cotidiano, se enfrentan a la máxima de soñar con estar cerca de las estrellas. Y esto también lo pueden alcanzar y sin pagar un duro, en Torrevieja.
En estos días tenemos la ocasión, si enfocamos al cielo por las noches de contemplar la lluvia de estrellas conocida como la lluvia de Perseidas o lágrimas de San Lorenzo que llega fiel a su cita anual de agosto. Miles de meteoros o bolas de fuego lanzan su luz y, si la bóveda celeste se mantiene medianamente despejada, se podrán pedir deseos y admirar un sinfín de estelas. El máximo de visibilidad fue anoche, y hoy sobre las dos de la madrugada. Un factor en contra será una luna nada normal. El satélite de la Tierra ha optado por aguar la fiesta a astrónomos galácticos y hacerse un 10 % más grande y hasta un 30 % más brillante. Esta superluna iluminará de más el hemisferio e impedirá contabilizar todas las estrellas fugaces, que veríamos en una noche estándar. La cercanía del astro que rige las mareas es la causa de que podamos verla en casi todo su esplendor, aunque el fenómeno chafe a medias, la lluvia de estrellas. Pero no todo son desventajas, las que veamos “serán las mejores y más potentes” y viajarán al ralentí. Cada lluvia de estrellas está asociada a un cometa. Las llamadas “estrellas fugaces” de las Perseidas son en realidad pequeñas partículas de polvo de distintos tamaños, por lo general menores que granos de arena, que va dejando el cometa “Swift-Tuttle” a lo largo de su órbita. Estas partículas de polvo, al contacto con la atmósfera terrestre, se desintegran a gran velocidad, creando los conocidos trazos luminosos que reciben el nombre científico de “meteoros”.
Por lo que se puede decir que el radiante Perseo se ha puesto de acuerdo, y hace posible el anuncio del esplendoroso desfile de una reina tan particularmente nuestra como es la Reina de la Sal. Así la ciudad anclada en el futuro, con una historia ligada a la sal (tanto es así que entorno a ella nace todo un pueblo) muestra en las noches agosteñas y bajo una bóveda iluminada por lluvia de estrellas a la mujer que representa a cuantos vivimos en este espacio rodeado por lagunas de agua salada. Ella ostenta el título de Reina de la Sal, con el privilegio de ser la soberana durante un año, de la ciudad y sus habitantes.
Descubre más desde Objetivo Torrevieja
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
Filed under: Actualidad, Asociaciones, Cultura |
Deja un comentario