Como cada año atendiendo a la seguridad de socios, visitantes y personal, el Real Club Náutico Torrevieja ha realizado un simulacro de incendio y de evacuación, donde por primera vez los protagonistas han sido los niños teniendo en cuenta ante todo su seguridad
Dentro de la campaña de seguridad que viene realizando el Club, en la mañana de ayer 31 de julio, tuvo lugar un simulacro de incendio y de evacuación “sin ayuda externa” donde se han visto involucrados casi una treintena de personas. Por primera por vez los niños han participado dentro del operativo que se encontraba en la zona de Vela, integrando a los niños de Sensaciones Recreativas.
Siguiendo con el plan de autoprotección del que dispones el Club (siendo pionero en el ámbito de la prevención de riesgos implantado hace casi veinte años) el simulacro, este año, se ha centrado en un problema de incendio, junto al aula de Vela y de evacuación de niños de Sensaciones Recreativas, ofreciendo a los más jóvenes, dentro de las diversas actividades que realizan, una clase trasversal de conocimientos ante una situación calificada de emergencia.
El simulacro consistió en un supuesto incendio, provocando gran cantidad de humo, por lo que era necesario evacuar conforme al Plan de emergencia. En el simulacro participaron el personal de recepción, marinería y los niños del aula, en total una treintena de personas, a lo que se añaden dos bomberos: el suboficial Pepe Celdrán y el responsable del grupo de rescate Fernando Bernabéu, que supervisaron la actuación.
Cada año se viene realizando en el Club este tipo de simulacro, poniendo al límite tanto las instalaciones como el personal, buscando diferentes escenarios. En años anteriores han sido situaciones límite en los pantalanes, cocina, con vertidos de residuos contaminantes, amarres, etc.
Los objetivos son: complementar la campaña de prevención realizada por el servicio contraincendios del Club con un ejercicio práctico. Comprobar la efectividad del Plan de Emergencia. Ver la respuesta y coordinación de los responsables de evacuación en la realización del simulando ante situaciones límite. Conocer la reacción ante la posibilidad de que alguna zona tenga alterada las condiciones de evacuación. Analizar posibles vías de evacuación con recursos para el servicio de Bomberos. Y en esta edición, enseñar a los niños, el comportamiento en caso de quedar atrapados, a la espera de la ayuda externa.
A decir de los expertos, en los casi quince minutos que duró el simulacro, el control de seguridad ha sido perfecto, así como la reacción del personal con un alto grado de profesionalidad ante el desalojo de los niños. El resultado del ejercicio ha sido calificado por los técnicos con un Notable Alto
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