Objetivo Torrevieja

La Casa de la tercera Edad de la Calle Pedro Lorca, consigue reunir más de 700 kilos de productos para Alimentos Solidarios

Donación productos casa de la 3ª Edad de la calle Pedro Lorca

F.Reyes

Numerosos colectivos y entidades de la ciudad están volcados estos días en recoger alimentos para que quienes peor lo pasan a causa de la situación económica tengan al menos un descanso en sus preocupaciones de cara a las celebraciones navideñas. La Casa de la Tercera Edad de la calle Pedro Lorca es uno de ellos, y se involucra cada año en la recogida de comida que se realiza todas las navidades y que va destinada a la sede de Alimentos Solidarios.Una iniciativa que cumple tres años desde que por primera vez, la idea de ayudar a las personas que atraviesan momentos difíciles durante este período de crisis, se ha convertido en costumbre entre los más mayores.
Por suerte siempre hay alguien dispuesto a ayudar. Para muchos, desde que arrancó la crisis, Alimentos Solidarios Torrevieja se ha convertido en una segunda casa donde poder abrir la despensa y encontrar un sustento. El catering social cuenta cada día con más personas, con el reparto de 260 comidas diarias que el centro reparte gratuitamente entre las familias atendidas por 75 voluntarios que colaboran por iniciativa propia en esta labor. No obstante, últimamente ya no dan abasto debido a la cantidad considerable de personas que acuden a pedir comida. Esto ha provocado que no se pueda atender todas las peticiones que se reciben y se haya tenido que crear una lista de espera que, muchas veces, supera las doscientas personas. Lorenzo Andrino, presidente de la Casa de la Tercera Edad, asegura que «se ha convertido en un problema de infraestructura porque «hay muchas personas que quieren y están dispuestas a ayudar pero se necesitaría un local más grande».
Los alimentos que ha destinado esta entidad alcanza los 700 kilos, que se han conseguido gracias a la colaboración de todos los socios y del propio centro de mayores. Lo más demandado son los lácteos. «Lo que solemos hacer es preguntar qué es lo que más necesitan. Normalmente el yogur es lo que mayor demanda tiene ya que el resto de alimentos lo tienen ellos», comenta Andrino. Sin embargo, donar comida ya no es un problema para los veteranos, e incluso se utilizan otros métodos. Los viernes es día de bingo en el centro y también una ocasión para juntar el dinero que sobre y designarlo a este tipo de proyectos.
Como todos los años el día 22 de diciembre el comedor solidario cierra sus puertas por Navidad. Lo que se ha hecho en el centro de mayores ante esta situación es intentar recaudar una mayor cantidad de productos que se repartirá entre las familias. A cada núcleo se les facilitará un litro de leche por persona, como también legumbres o artículos envasados. Esta ayuda no alcanza el cien por cien de sus necesidades, aunque sí cubre una proporción importante para que pasen esta época del año.
La ciudad cuenta con grandes contribuyentes de Alimentos Solidarios en este sentido y este centro de la tercera edad es un ejemplo más de cooperación y de trabajo desinteresado con el único objetivo de prestar ayuda a los más necesitados.

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