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Torrevejenses Viajeros: “USA, Canadá…y Torrevieja”

Álbum, pinchando sobre la foto

Álbum, pinchando sobre la foto

Juana Martínez Valdivia
Periodista RTVE.

Este año decidimos, por primera vez en mucho tiempo, no pasar agosto en Torrevieja. Muchos fueron los motivos que forzaron la decisión, pero el principal fue el incremento de población que vive la ciudad en ese mes, que nos impide disfrutar de sus actividades, tiendas, restaurantes o bares como a nosotros nos gusta.Después de consultar diferentes agencias nos decidimos por CATAI TOURS, las referencias eran buenas y venían de fuentes conocidas.Si alguno está pensando en viajar a USA, además de lo que todos sabemos, tiene que tener presente que si sus apellidos son muy españoles, tipo Pérez, López, García, etc. Lo más probable es que al llegar se encuentre con una retención en la Aduana de casi dos horas, el tiempo que necesitan hasta verificar la identidad, porque no es nada raro que haya varias personas con el mismo nombre y apellido.Ah! Nada de jamones, chorizos, salchichones…, envasados al vacío. Ni tampoco plátanos o mangos. Son muy pesados con el tema de los plátanos. La pareja que pasaba el control delante de nosotros tuvo muchos problemas por esos productos, que se quedaron en la mesa de los agentes.Tras ocho horas de vuelo, el paso de la Aduana, con las retenciones pertinentes por lo del nombre hispano, llevar embutidos y el lio con la fruta, porque la gente cuando viaja quiere si o si, llevarse cosas de casa, es decir, los ibéricos y los plátanos de Canarias, llegamos a New York. Nada mejor que una cervecica bien fresca y porque no dos en vez de una y zas, la primera sorpresa, cuatro cervezas a 9 dólares cada una 36 dólares más cuatro más de propina obligatoria. Lo primero que te viene a la cabeza son tus sitios favoritos LAS CAÑAS, BARLOVENTO, LA ALONDRA y L´ABRI-CÔTIER, no sólo por el precio, si no por los aperitivos, porque en USA nada de aperitivos. Si, te ponen unas cuantas patatas fritas por 12 dólares.Para compensar el “sobresalto” nos fuimos a disfrutar de la Catedral de San Patricio y a Central Park, para homenajear a John Lennon. Por cierto, en esa zona donde los pisos son prohibitivos, en algunas comunidades los respectivos vecinos deciden quién será el nuevo propietario independientemente de su poder adquisitivo. Y, según nuestro guía, Antonio Banderas, no dio el perfil por culpa de su anterior mujer.El viaje que hemos contratado es impresionante, incluye entre otros la visita a diferentes lugares de Nueva York, Philadelphia, Washington D.C, Boston, Niágara, Toronto, Ottawa, Parque Omega, Quebec y Montreal.
Varias cosas me han impactado en la última etapa del periplo: por cada árbol que cortan y tienen un montón, plantan un mínimo de cuatro; el respeto a la naturaleza es absoluto y, cero en delincuencia. Si, nada de nada. En Montreal llevan ya 30 kilómetros de algo parecido a una ciudad subterránea, para llevar mejor las bajas temperaturas, donde encuentras todo tipo de tiendas, pista de patinaje, entrada a las iglesias, al metro, a las estaciones de autobuses, hoteles…, es decir, no pasan dada de frío, y viven en paralelo a la ciudad exterior.Otro dato a tener en cuenta, siempre hay que controlar las maletas, más de lo que ya pensamos y sabemos. Nosotros siempre ponemos una tira con la bandera de España, indicando la dirección, nombre y teléfono, lo que facilita su búsqueda. ¡Seguro! En varios viajes lo he comprobado y en este también, pese a que muchos eran escépticos.Los que me conocen saben que siempre hago lo imposible por visitar los museos. En esta ocasión no podía dejar de ver The Museum of Moderm Art (MOMA) en New York. De verdad que me costo, pues no había tiempo, pero yo tenía que verlo y lo vi. Había unas salas dedicadas a YOKO ONO, interesantes.Unos maravillosos cuadros de PICASSO, VAN GOGH, GUSTAV KLIMT, JAMES ENSOR, entre otros ¡Un buen “chute” de cultura, para aguantar el resto del año! Ya había amortizado el viaje. Ver el cuadro de “La noche estrellada”, de Van Gogh, cuando no sabía que estaba en el MOMA, fue una grata sorpresa que me compenso todo, absolutamente todo. Asimismo tuve ocasión de visitar en Washington D. C, La Galería Nacional de Arte, donde admire unos impresionantes cuadros de, según ponen ellos, SIR PETER PAUL RUBENS, entre otros…
Una auténtica pasada es el Museo Nacional del Aire y el Espacio, contiene la mayor colección de aviones y naves espaciales del mundo, la mayoría de lo expuesto son originales.
Lo mismo ocurre con la Basílica de Notre Dame, en Montreal, el “alma” te pide quedarte allí horas y horas, pero no era posible.
Otro detalle: compensa más pagar con tarjeta, en sitios de confianza, que en con efectivo. Aunque el hotel The Roosevelt, ubicado en la 45E th Madison Avenue, me duplicó los cargos. Cierto es que a los 10 días, como indicó el director de mi banco, me lo compensaron.
Me agrado ver a los animales del Parque Omega, o el crucero por las “Mil Islas”, donde nace el Río San Lorenzo, inmenso. El guía dijo, se lo pregunte varias veces, que en su desembocadura llega al medir 60 Km.
Impacta el metro de Washington D.C., aunque no creo que supere mucho al nuestro de Madrid. No puedo decir los mismo del de New York, que lo “vivimos” durante unos 50 minutos para ir a visitar la zona del atentado de las Torres Gemelas, el 11 de septiembre, y el Museo homenaje a las víctimas. Y, cómo no recordar la maravillosa ciudad de Boston y la Universidad de Harvard, que tiene 10 ó 12 alumnos por clase. Si 10 ó 12 máximo.
Siempre, hay que dar propina al que te recoge las maletas, al guía, al conductor y, entre el 10 y el 15 por ciento, en los restaurantes, pero ojo hay que comprobar si no lo incluye en la factura, porque algunos si lo hacen ya. Es decir, hay que comprobar y leer bien antes de pagar.
Cuando todo termina y llegas a nuestra Torrevieja, a nuestro pequeño apartamento, a descansar dices en voz alta por enésima vez: “como en casa en ningún sitio”, al tiempo que sientes una satisfacción inmensa, que se incrementa cuando vas a tus lugares favoritos. Y, eso que en este viaje, no hemos tenido sorpresas desagradables. Los hoteles ad hoc con lo contratado, el mejor FAIRMONT LE CHATEAU.
Lo dicho, ahora a saborear en Torrevieja, de los calderos, arroz con bogavante, paellas, estupendas ensaladillas rusas, en mis restaurantes favoritos: Barlovento, Las Cañas, La Alondra y L´Abri-Côtier, donde ponen los mejores mejillones.
Y, aunque muchos lo sabéis, pero me gusta decirlo, a disfrutar de mis entrañables y queridos amigos torrevejenses de forma especial de nuestro único Fos, Fernando Guardiola.
No voy a desconectar, como nunca lo hago, de la palpitante actualidad política, cultural y deportiva, a pesar de que en alguna rueda de prensa me pregunten aún quién soy. Voy a seguir disfrutando del mar, nuestro mar tan querido. Seguiré siempre, siempre insistiendo en su cuidado y limpieza. Es obligación de todos, me duele mucho ver la cantidad de bolsas de plástico que se tiran como si fuera un basurero, que se incrementa a primera hora de la mañana, con restos de cajas de cebos, o cómo se dejan de sucias las playas, sin ningún respeto por nada ni por nadie. Insisto, educación, educación…
Ya en el mes de septiembre no te puedes bañar regularmente en el Mediterráneo porque las medusas lo impiden, algo que puede llegar a afectar mucho al sector turístico. Hay que volver al equilibrio del ecosistema marítimo. Cada vez quedan menos predadores de las medusas, es decir, el atún, pez espada, pez luna, la tortuga marina, además, de la sobreexplotación pesquera. ¡En fin! Una gran pena. Hay que hacer algo, pero ya sin más demora.
Y, nunca, nunca me olvidare de mi mascota, como he hecho los últimos 30 años, pues también tiene derecho a disfrutar del mar, aunque la primera travesía del año le cueste un soponcio.


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