La familia de la chica que cayó de un décimo piso en Benidorm, denuncia las contradicciones de la versión que dan los cinco hombres que se encontraban en la habitación y pide la imputación de todos ellos. Equipo de Zumaquero Abogados, esta trabajando en enclacer el hecho
Álbumes, pinchando sobre la foto
La familia de Kristy, la joven que falleció el pasado 29 de abril al caer desde la planta décima de los apartamentos PAYMA, no está conforme con la versión oficial de la policía, soportada también por el Ministerio Fiscal, de los hechos acaecidos. Según las investigaciones llevadas a cabo, dentro de la habitación desde la que se precipitó la víctima, se encontraban cinco hombres de los cuales uno había sido investigado por una violación, en el Reino Unido, otro había sido condenado a dos años y medio de prisión por una estafa de 153.000 libras y otro era campeón de MMA, una disciplina de artes marciales especialmente agresiva. En la habitación, además de restos de cocaína y alcohol, la policía encontró “TADALAFIL TABLETS ERECTAFIL 20”, una medicación utilizada para mantener la erección, de las cuales se habían consumidos dos pastillas. La versión de estos sujetos es que la chica llamo a la puerta, uno de ellos le abrió, y sin mediar palabra se metió al cuarto de baño, intentó salir por una pequeña ventana y posteriormente salió del baño y se lanzó por el balcón, ello en el trascurso de unos 30 segundos. Esta versión es inverosímil, puesto que, según la familia, Krisity era una persona feliz, estable, era recién casada y tenía una vida plena y con muchos proyectos, entre otros, el de ser madre. Por lo tanto, descartan completamente el suicidio, pero apuntan absurdo que si hubiera decidido quitarse la vida lo hubiera hecho en la habitación de unos desconocidos y en la despedida de soltera de una amiga. A pesar de estar esperando los resultados de la autopsia, la familia descarta el consumo de estupefacientes, pues así lo corroboran las amigas que la acompañaban, además de que cuando sucedieron los hechos la joven ya había estado dos horas dormida, lo que es incompatible con alucinógenos o psicotrópicos que hubieran generado un comportamiento paranoide. El marido y los padres de la joven se han personado como acusación particular, mediante la dirección letrada del letrado Luis Miguel Zumaquero, y han interesado ante el Juzgado que instruye el caso, además de la práctica de más pruebas conducentes a aclarar lo sucedido, la imputación de todos los que se encontraban en la habitación, pues consideran inverosímil que ante tales incongruencias y contradicciones por parte de los que se encontraban, solo se haya imputado a uno de ellos.
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