Objetivo Torrevieja

El impresionante despliegue de fuerzas de seguridad y la implicación de la ciudadanía no consiguieron atrapar al ladrón

VÍDEO: Algunas de las joyas robadas y estado de las cajoneras tras el expolio

Eran poco más de las siete de la tarde cuando un individuo con una gorra calada y una mascarilla, se introdujo en la Joyería Hernández, situada en calle María Parodi de Torrevieja. Según nos relata la propia, Marta Hernández, gerente de la misma, el individuo en cuestión portaba dos grandes bolsas de conocidos centros comerciales de la zona, poniendo una de ellas en la puerta para que no pudiera cerrarse.

Cuando la dueña se percató de la operación, el ladrón les saco una pistola a ella y la empleada, ordenando a esta última que abriera rápidamente los cajones donde estaban expuestas las joyas.
Cuando ya había vaciado todas las cajoneras, la empleada I. G .R., le reconoció y dirigiéndose a él le dijo que el martes, había estado en la joyería acompañado, de la que dijo era su novia viendo cadenas de oro, cesando entonces el ladrón la recogida y saliendo a toda velocidad en dirección de la calle Pedro Lorca.

Al grito de ¡Al ladrón ¡Al ladrón!, los clientes de los establecimientos de la calle salieron en su persecución, intentando detener el vehículo en el que huía colocando contenedores, los que esquivó de forma tan aparatosa que perdió la matrícula en uno de los golpes, a su paso por la Calle Orihuela frente a las oficinas de los compañeros de Torreguía.

No habían pasado ni cinco minutos cuando una impresionante comitiva de dotaciones de Policía Local y Guardia Civil se personaron en la joyería, saliendo algunas en su persecución y activando el protocolo correspondiente en estos casos, incluida la denuncia que se presentará esta mañana en el juzgado correspondiente y que se acompañara de todo el material gráfico y de las cámaras de seguridad del establecimiento.

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