Objetivo Torrevieja

Álbum de la aventura, pinchando sobre la foto

Juanma Medina, nació hace 39 años en Torrevieja y desde muy joven vivió el deporte, practicando diversas disciplinas, hasta que en 2008, descubrió  lo que significaban las pruebas de carrera, en su especialidad de “ultrafondo”, y en “auntosuficiencia”. En Abril de ese mismo año realizó el “Maratón Des Sables” (de las arenas), en el desierto de Sáhara, con la ayuda de amigos y particulares,quedando el 38º de 850 participantes. Animado por el resultado, en Mayo de ese mismo año realizó los 101 kms. De la “Serranía de Ronda”,en que quedó en el puesto 35º de 3500. En Marzo de 2009, hizo los 80 kms de Alcoy, quedando 2º de  108 y ese mismo año, en el mes de Mayo, emprendió el “Camino solidario de Santiago”, carrera que realizó a beneficio de las asociaciones locales ALPE y APANEE, logrando hacer 600 km. En 7 días hasta su amarga lesión, que le retiró de la misión. En Mayo de este año y con el patrocinio de la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Torrevieja, que ya había colaborado con el en anteriores retos, la Concejalía de Turismo, Pub Genius, Hotel Madrid, Pastor Medina, Anvamar, Floristería Lola y Óptica Chantal, emprende el que sería el más duro y peligroso de sus retos, la “Prueba de ultrafondo y autosuficencia 2010”, el segundo de los retos, con el que quiere completar el ciclo en los cinco continentes. Para ilustrarnos sobre esta aventura, Juanma, nos ha relatado para los lectores de “Vista Alegre” su aventura, que llevó a las antípodas el nombre de Torrevieja.

“El 25 de Mayo comenzaba en la zona de Kimberley la prueba de ultrafondo llamada “Australia 2010” y organizada por Racing the Planet.

Se trata de una carrera de ultrafondo de 250 km y en autosuficiencia. ¿Que quiere decir autosuficiencia?. Pues básicamente que los competidores tenemos que cargar en una mochila con todo el equipo, la comida y cualquier cosas que vayamos a necesitar en los 7 días que dura la competición. La organización nos exige una cantidad mínima de calorías (14000 kcal) así como una larga lista de material obligatorio, que garantice al máximo nuestra seguridad durante la prueba. Analgésicos, saco de dormir, frontales de luz para correr por la noche y poder movernos por el campamento en la oscuridad de la noche, aspiravenenoso y vendas de compresión para picaduras de serpientes, manta de supervivencia etc. Este material junto con la comida y sin contar el agua da un peso en la mochila de unos 8,5 kg. Por esta razón una de las cosas mas importantes de esta carrera es la logística, ajustar al máximo peso y alimento, intentar llevar estrictamente la comida justa para superar la prueba. Esta opción te garantiza pasar bastante hambre durante la prueba ya que la comida que se va a tomar durante todo el día incluyendo barritas energéticas durante el tiempo que se disputa la carrera y las tres comidas principales (desayuno, comida y cena) no excede de 450-500 gramos. Tanto control en la comida sería una tontería si después no se lleva un material técnico donde prime sobre todas las cosas el peso, sacrificando la comodidad o funcionalidad.
La organización sólo nos suministrará una cantidad de agua determinada y que nos será entregada en cada uno de los controles por los que pasamos y que están separados entre si por unos 10 km aprox. También no proporcionarán una carpa (Haima) para descansar. Así que dentro de la mochila y siempre sobre nuestra espalda debemos llevar todo lo demás.
En Australia las temperaturas se esperaban altas, nos llegaban noticias antes de salir que las podrían rondar los 35º y hasta el 80% de humedad (algo así como Torrevieja en agosto a medio dia). Pero el primer día nos sorprendio a todos con 46º y un 60% de humedad que nos hizo pasar un mal rato para poder completar la etapa del primer día. Muy importante para este tipo de pruebas donde el calor es tan grande la utilización de pastillas de sal para la rehidratación del organismo. Los 250 km de la carrera estaban divididos en 6 etapas con las siguientes distancias. 42 km, 39 km, 34 km, 18 km, 100 km y 20 km, aunque la organización decidió acortar la última etapa debido a la dureza que se había tenido en la prueba (la más dura de todas las que se han celebrado según la organización), ya que los participantes que aún se mantenían en carrera presentaban unas condiciones fisicas lamentables, debido al calor y a la humedad que fue lo que realmente hizo insufrible la prueba.
¿Por que me gustan estas pruebas?, porque me han enseñado a superar mis limites físicos y psicológicos, a ser paciente ya que es lo único que te queda cuando te tienes que enfrentar a jornadas de 100 km, a sacar lo mejor que llevamos dentro cuando ves a personas arrastrándose para poder terminar una de estas pruebas y sólo su voluntad le impide detenerse y abandonar. El respeto que se respira entre todos los participantes ya sea el primero o el último, aquí lo importante sólo es terminar sin importar si lo haces de los primero o de los últimos. Todos los que estamos en alguna de estas pruebas sabemos lo duro que es poder acabar, así que cuanto más atrás se termina más tiempo se está sufriendo. Por eso el último participante de la etapa “non stop” (100 km), se lleva el mayor de los aplausos y reconocimientos cuando acaba. Para mi fue un orgullo personal, y sobretodo pensar que lo hacía en nombre de una ciudad, Torrevieja.

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