Objetivo Torrevieja

FRANCISCO REYES | TORREVIEJA.

Tras cinco años de no concurrir a la campaña de banderas azules, el Ayuntamiento de Torrevieja, volvió a optar este año a este galardón, que distingue a las playas en materia de sostenibilidad, accesibilidad, medio ambiente y limpieza, presentando la candidatura de seis playas y zonas de baño del litoral torrevejense.

El resultado fue la concesión de la bandera azul a sólo dos, la playa de los Náufragos, en la zona de El Acequión, y a la Cala Piteras, en la zona sur del término, lindando con las Playas de Orihuela, después de una importante obra de regeneración y ampliación de esta cala, a cargo del Ministerio de Medio Ambiente.

El resto, playas como la de Torrelamata, que Torrevieja considera como su máximo exponente en esta materia, se quedaron sin este distintivo, a pesar de estar en posesión de otros, como la bandera ‘Ecoplayas’, que sólo poseen unas cuantas en toda España, o las certificaciones ISO que, una vez más han conseguido la totalidad de las playas torrevejenses.

Al parecer, a finales del pasado mes de julio, con la temporada veraniega ya terciada, la Fundación Europea de Educación Ambiental y, en concreto, la Asociación de Educación Anbiental y del Consumidor, organismos responsables de la concesión de las banderas azules en España, han ofrecido explicaciones sobre la denegación del distintivo a las playas de Torrelamata, Cabo Cervera, Los Locos y la playa del Cura.

En el caso de la playa de La Mata, se considera afectada por un expediente de incumplimiento de la Ley de Costas, con respecto a un inmueble de propiedad privada, de planta baja y una altura, cerca del núcleo poblacional de la pedanía torrevejense, donde existen tres restaurantes, otro local de restauración chino y un supermercado 24 horas

Una situación que, por lo visto, pasarán años hasta que se resuelva, en el caso de que el asunto acabe en una demolición.

Pero lo realmente llamativo de estas explicaciones es que se señala que para el resto de playas es necesario inspeccionarlas antes de la concesión del galardón, según el protocolo de bandera azul. Por tanto, dichos organismos, tienen previsto realizar la citada inspección durante la presente temporada de baño, con el fin de valorar dichas playas para posteriores candidaturas, con lo que se entiende que para la candidatura a la que concurrieron este año, podría habérseles denegado las banderas a estas playas, sin ni siquiera haber sido inspeccionadas.

El asunto ha causado de entrada un cierto malestar en el seno del Consistorio torrevejense, y de confirmarse este extremo aún podrían ser mayores las molestias, teniendo en cuenta la ilusión del Ayuntamiento y el esfuerzo que el departamento municipal de Playas había puesto este año en poder conseguir este distintivo para las playas de su litoral.

Un hecho similar ocurrió hace seis años, cuando estos organismos indicaron al Ayuntamiento que la razón por la que no concedían la bandera azul, a la céntrica y popular playa del Cura, estaba basada en una saturación de bañistas.

Una razón que no comprendió el gobierno muncipal, porque no hay una manera, a simple vista, de corregir este aspecto. El Ayuntamiento se irritó hasta tal punto que durante cinco años no ha presentado candidatura alguna de las playas para optar a las banderas azules, hasta este.

Sin embargo la totalidad de playas del litoral salinero, renuevan año tras año, los certificados de calidad y medio ambiente ISO 9.001 y 14.001, respectivamente, otorgados por Aenor ( Asociación Española de Normalización y Certificación), tras unas exhaustivas auditorías, que manifiestan la calidad de las playas de Torrevieja, según las directrices de la UE.